Una obra maestra equivale a la obra más notable en la carrera de un artista, evidenciando lo más importante de su técnica y sus ideales. La Mona Lisa de Leonardo da Vinci; la Piedad de Miguel Ángel; Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band de Los Beatles. Hay muchos ejemplos, aunque no siempre son unánimes. Sin embargo, ¿qué pasa si una obra maestra fue iniciada por otra persona, el autor no vivió para ver su finalización y casi toda su documentación fue destruida? El arquitecto catalán Antoni Gaudí y su célebre Templo Expiatorio de la Sagrada Familia son ejemplos de todo esto. Desde una construcción de piedra altamente trabajada hasta las más modernas técnicas de impresión 3D y hormigón de alta resistencia, el proyecto incorporó y sigue incorporando numerosas tecnologías durante su construcción.
Eduardo Souza
Editor Senior de Brands & Materials en ArchDaily. Arquitecto y máster por la Universidad Federal de Santa Catarina (UFSC).
La translucidez del Policarbonato: Resistencia y Versatilidad
Los materiales transparentes permiten que la luz pase sin dispersarse. Los materiales translúcidos, por su parte, son aquellos que te brindan una transmisión de luz natural dispersando la iluminación de una forma más agradable y regulada. Las superficies translúcidas actúan como velos, difuminando el contacto entre el interior y el exterior. En la arquitectura, este es un efecto utilizado en muchos proyectos. Desde las características fachadas de Steven Holl, hasta el IMS en São Paulo, pasando por muchos otros ejemplos de arquitectura mundial, esta translucidez se puede lograr con vidrios especiales, acrílicos u otros plásticos. Pero un material que entrega intrínsecamente este efecto es el policarbonato, que puede utilizarse en multitud de casos, desde muros hasta tragaluces, y en los programas más diversos.
El potencial del bambú y la madera en masa para la industria de la construcción: una entrevista con Pablo van der Lugt
Pablo van der Lugt es arquitecto, autor de libros y conferencista. Su investigación se centra en el potencial de materiales como el bambú y la madera sintética para el sector de la construcción civil y sus impactos positivos en el mundo.
"Durante mi carrera profesional en la universidad (incluida mi investigación de doctorado sobre la huella de carbono del bambú y la madera sintética) y en la industria durante los últimos 15 años, he descubierto que existen muchos conceptos erróneos sobre estos materiales que dificultan que sean ampliamente adoptados. Por esta razón, "traduje" los resultados de mi investigación en dos libros contemporáneos para diseñadores y arquitectos sobre el potencial del bambú: Booming Bamboo y Madera de ingeniería: Tomorrow’s Timber. Su objetivo es disipar estos mitos y mostrar el increíble potencial de la última generación de materiales de construcción de base biológica en la transición necesaria hacia un entorno de construcción circular, saludable y neutro en carbono".
Little Island Park y la colaboración entre diseñadores, contratistas y fabricantes: Una entrevista con Arup
Pier 54 en Nueva York tiene una historia que se remonta a los primeros habitantes de la ciudad. Después de sufrir graves daños en 2012 con el paso del huracán Sandy, Barry Diller y la institución Hudson River Park Trust trabajaron para crear soluciones que permitan reactivarlo y devolver el espacio al público.
El proyecto resultante, Little Island Park, se convirtió en un oasis urbano de casi 10.000 metros cuadrados, que se estructura sobre 132 pilares y que alberga anfiteatros y varias especies de árboles y arbustos, además de otros atributos. Con la arquitectura desarrollada por Heatherwick Studio y el paisajismo por MNLA, el trabajo presentó numerosas dificultades, lo que requirió de gran innovación y colaboración entre muchos profesionales. Arup, empresa global que desarrolla proyectos de consultoría e ingeniería, estuvo involucrada en el proyecto desde el principio. Hablamos con David Farnsworth, director de Arup en Nueva York y director de proyectos de Little Island, sobre los desafíos y aprendizajes involucrados en este proceso.
Josep Ferrando: "Un sistema es flexible cuando acumula la máxima cantidad de algoritmos, generando espacios complejos pero sin complicaciones"
Josep Ferrando es un arquitecto con sede en Barcelona. Es decano de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de La Salle (ETSALS), además de director del Centro Obert d´Arquitectura de Barcelona y del Departamento de Cultura del Colegio de Arquitectos de Cataluña (COAC). Integrando su trayectoria académica y sus frecuentes conferencias, su oficina desarrolla proyectos que exploran diferentes escalas y materiales, experimentando con sistemas constructivos y soluciones innovadoras. Conversamos con él sobre la importancia de los materiales en la arquitectura, y sobre las sinergias que encuentra entre la práctica y la docencia.
El cemento puede ser un material (más) sostenible
"Si la industria del cemento fuera un país, sería el tercer mayor emisor de dióxido de carbono del mundo, con cerca de 2.800 millones de toneladas, siendo solo superado por China y Estados Unidos". Esta declaración llama la atención dentro del reportaje de Lucy Rodgers para la BBC sobre la huella ecológica del hormigón. Con más de 4 mil millones de toneladas producidas cada año, el cemento representa alrededor del 8% de las emisiones globales de CO2 y es un elemento clave en la producción del hormigón, el producto más fabricado en el mundo. Para hacerse una idea, se produce aproximadamente media tonelada de cemento por persona en el mundo cada año, suficiente para construir 11.000 edificios similares al Empire State. Con estas impresionantes cifras, ¿existe alguna forma de reducir este impacto?
La prefabricación podría hacer más asequible la construcción de viviendas
El concepto de prefabricación en el campo de la construcción corresponde a elementos, partes o edificios completos producidos en fábricas y transportados al sitio de construcción para una instalación exprés. Esto entrega numerosas ventajas sobre los métodos constructivos tradicionales, como rapidez, precisión en los procesos, eficiencia, limpieza en la obra y, en muchos casos, ahorros económicos. Si consideramos que la vivienda es una necesidad humana primaria, el uso de métodos industriales para la construcción de viviendas asequibles y de buena calidad siempre ha movido a los arquitectos, ya sea para dar soluciones a poblaciones urbanas en crecimiento, o para levantar asentamientos temporales o de emergencia, en las más diversas escalas. Luego de muchos intentos en la historia, queda la duda de si la popularización de la prefabricación puede ser una solución para entregar una mayor equidad en el acceso a la vivienda.
¿Será la remodelación la especialidad de los arquitectos en el futuro?
La elección de Lacaton & Vassal como ganadores del Premio Pritzker 2021 fue, por sobre todo, emblemática. Bajo el mantra "nunca demoler, quitar ni reemplazar, y siempre sumar, transformar y reutilizar", el dúo francés ha construido una carrera enfocada en la renovación de edificios, dotándolos de calidad espacial, eficiencia y nuevos programas. Su enfoque contrasta con gran parte de la arquitectura a la que estamos acostumbrados: obras icónicas, imponentes y grandiosas. También contrasta con la noción de tabula rasa –de construir y reconstruir desde cero–, tan bien representada en la Ville Radieuse de Le Corbusier, que fascinó a arquitectos y urbanistas desde entonces.
Ya sea por exigencias de sostenibilidad, o simplemente porque ya existen suficientes edificios en todo el mundo, la tarea de rehabilitar espacios y edificios se visualiza como un importante motor de cambio. En general, el enfoque es centrar los esfuerzos en los espacios interiores, prestando especial atención a la calidad ambiental y el confort de los habitantes, además de adecuar los usos a las exigencias contemporáneas. La preocupación principal gira en torno a cómo actualizar (e incluso automatizar) los edificios del pasado para adaptarlos a las nuevas necesidades de eficiencia, sostenibilidad y bienestar.
¿Pueden los techos verdes mejorar nuestras ciudades?
Los investigadores señalan a los Jardines Colgantes de Babilonia como los primeros ejemplos de techos verdes. Aunque no hay pruebas de su ubicación exacta y existe muy poca literatura sobre sus estructuras, la teoría más aceptada es que el rey Nabucodonosor II construyó una serie de terrazas elevadas y ascendentes con especies variadas como regalo a su esposa, quien extrañaba los bosques y las montañas de Persia, su tierra natal. Según Wolf Schneider [1] los jardines estaban sostenidos por bóvedas de ladrillo, y debajo de ellos, había una serie de pasillos sombreados enfriados por el riego artificial de los jardines, con una temperatura mucho más baja que la del exterior, en la llanura de Mesopotamia (actual Irak). Desde entonces, han aparecido ejemplos de cubiertas verdes en todo el mundo, desde Roma hasta Escandinavia, en los más diversos climas y tipos.
Aún así, la solución de incluir plantas en el techo todavía es vista con desconfianza por muchos arquitectos y urbanistas, siendo considerada una solución costosa y difícil de mantener. Otros, sin embargo, argumentan que los altos costos de ejecución se amortizan rápidamente con ahorros en climatización y que, por sobre todo, ocupar la quinta fachada del edificio con vegetación es una solución racional. En cualquier caso, la pregunta se centra ahora en si realmente los techos verdes pueden ayudar con el cambio climático.
¿Qué pasa si el hormigón de cáñamo se incendia?
Cada vez que publicamos un artículo sobre Hempcrete u Hormigón de Cáñamo, recibimos muchos comentarios en las redes sociales, con cierto nivel de ironía, sobre ¿qué pasaría si el material se incendiara? De hecho, esta es una pregunta legítima, ya que todavía existe mucha confusión sobre las diferencias entre la marihuana y el cáñamo, ambos provenientes de la misma especie de planta (Cannabis Sativa). Pero mientras la marihuana tiene efectos psicoactivos debido al tetrahidrocannabinol (THC), presente principalmente en las flores de la planta, los materiales de construcción a base de cáñamo se producen a partir de su tallo, que contiene pequeñas dosis de THC. Respondiendo rápidamente a la pregunta del título: no, el edificio no se destruirá en caso de incendio. De hecho, algunas pruebas han demostrado que estos materiales tienen un excelente comportamiento frente al fuego, disipan las llamas, mantienen la integridad estructural y no emiten humo tóxico.
¿Impresión 4D? Uniendo la fabricación aditiva y los materiales inteligentes
Si bien todavía estamos tratando de comprender las posibilidades y los límites de la impresión tridimensional y la fabricación aditiva, ya aparece un término más en nuestro vocabulario. La impresión 4D no es más que una tecnología de fabricación digital, la impresión 3D, que ahora incluye una nueva dimensión: la temporal. Esto significa que el material impreso, una vez finalizado, podrá modificarse, transformarse o moverse de forma autónoma debido a sus propiedades intrínsecas que responden a los estímulos ambientales.
El concepto fue popularizado por el investigador Skylar Tibbits, director del Laboratorio de Autoensamblaje del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en colaboración con Stratasys y Autodesk. La tecnología todavía es bastante nueva, pero se espera que se utilice en muchos campos, desde la construcción, la infraestructura, la industria automovilística y la aeronáutica e incluso para la atención médica, combinada con la bioimpresión.