Un muro Trombe es una característica pasiva de los edificios solares que mejora la eficiencia térmica. Posicionado en el lado que recibe el sol de una estructura, consiste en un muro hecho de materiales como ladrillo, piedra o concreto, y un panel de vidrio o lámina de policarbonato colocado a unos centímetros de distancia. La radiación solar penetra el vidrio durante las horas del día y calienta el muro de albañilería. Este muro luego libera lentamente el calor almacenado en el edificio durante las horas más frescas de la noche, manteniendo una temperatura interior más consistente sin necesidad de sistemas de calefacción activos.
El papel principal de la arquitectura es crear estructuras que nos protejan del medio ambiente y, a su vez, espacios seguros y cómodos para todo tipo de necesidades y actividades. Al proporcionar refugio, la arquitectura también moldea la forma en que las personas interactúan con su entorno. Sin embargo, las tecnologías de construcción del pasado rara vez lograron crear una separación completa entre nosotros y el mundo exterior.
Si bien la impermeabilidad era un resultado deseado, los materiales de construcción porosos disponibles siempre permitían que algo de agua, viento o partículas externas se filtraran a los espacios interiores. Por el contrario, las tecnologías modernas ahora permiten envolventes de edificios casi completamente impermeables, generando una separación completa entre el interior y el exterior, y confiando así en sistemas de ingeniería para regular la temperatura, el flujo de aire o la humedad. Este artículo explora las diferencias entre estos dos enfoques contrastantes, indagando cómo se equipan las fachadas de los edificios para regular el confort interior y su impacto ambiental.
Al momento de indagar en la envolvente de la construcción y cómo se relaciona el interior con el exterior, la figura de los invernaderos aparece como una oportunidad para generar vida en un interior a partir de factores externos o no. Conocido como aquel espacio recubierto por vidrio o cualquier otro material plástico transparente, el invernadero permite cultivar hortalizas y plantas ornamentales durante épocas con condiciones climáticas externas que no permitirían realizarlo fuera. Pero, ¿qué involucra diseñar para las plantas? El clima, las especies, el diseño de estructura y el tipo de cubierta son sólo algunas de las consideraciones a tener en cuenta.
Fachadas solares en el Hospital Bornholm. Imagen cortesía de SolarLab
La degradación ambiental ha puesto de manifiesto la necesidad de nuevas fuentes de energía. Un cambio en las fuentes de energía requiere medios innovadores de almacenamiento de energía. Durante siglos, los edificios han demostrado ser capaces de almacenar personas, objetos y sistemas, lo que invita a reflexionar sobre su potencial sin explotar para almacenar grandes cantidades de energía de manera eficiente. En esta nueva era, ¿pueden los edificios ir más allá de ser estructuras funcionales para convertirse en posibles reservas de energía?
Ante la crisis ambiental y la necesidad de mitigar los efectos del cambio climático, se vuelve cada vez más importante e imperativo adoptar fuentes de energía limpias y renovables en los proyectos de arquitectura. Siendo un país con abundante incidencia solar a lo largo del año, Brasil tiene un enorme potencial para aprovechar esta fuente de energía que, año tras año, se ha convertido en una opción cada vez más atractiva y viable en el escenario brasileño (En Brasil, la energía solar superó en potencia a la hidroeléctrica de Itaipú). Una de las tipologías favorecidas es la residencial, que ha ganado protagonismo debido a los numerosos beneficios que la energía solar puede ofrecer tanto a los residentes como al medio ambiente.
¿Qué estrategias proyectuales o nuevas tecnologías pueden integrarse en el diseño arquitectónico sin poner en riesgo al medioambiente? Durante los últimos años, las energías renovables están pisando cada vez más fuerte a nivel mundial y la energía solar fotovoltaica es una de las tantas que presentan un crecimiento exponencial.
CRA-Carlo Ratti Associati, junto con el arquitecto Italo Rota y el urbanista Richard Burdett, dieron a conocer el plan maestro para la candidatura de Roma para acoger la Exposición Universal en 2030. El proyecto propone un esfuerzo conjunto de todos los países participantes para contribuir a una granja solar que podría alimentar el recinto ferial y ayudar a descarbonizar los barrios aledaños. Se propone que la Expo se lleve a cabo en Tor Vergata, una vasta área en Roma y hogar de la universidad del mismo nombre y un distrito residencial densamente habitado. Todos los pabellones están diseñados para ser completamente reutilizables, ya que se propone que el área se transforme en un distrito de innovación después del evento con la esperanza de revitalizar el vecindario algo descuidado. El plan maestro se desarrolló con varios socios, incluidos ARUP para la sostenibilidad, la infraestructura y los costos, LAND para el diseño del paisaje y Systematica para la estrategia de movilidad.
Parece que todo el mundo se está volviendo solar en estos días. En Estados Unidos, la generación neta de energía solar ha aumentado en más de 113 mil millones de horas en la última década. La integración solar con proyectos residenciales ahorra dinero a los propietarios de viviendas en las facturas de energía y aumenta el valor de la propiedad con el tiempo. A medida que avanza la tecnología de integración solar, las ventajas van más allá de las financieras y medioambientales; los paneles solares también están asumiendo un papel estético en la arquitectura moderna.
La integración solar se está convirtiendo en una expectativa entre los nuevos compradores de vivienda. Los arquitectos y diseñadores deben adaptarse en consecuencia para aumentar la disponibilidad de integración fotovoltaica en desarrollos residenciales. Sin embargo, con una planificación y ejecución cuidadosas, los paneles solares se pueden incorporar mejor durante las fases de diseño y construcción. Este artículo describe cómo los constructores de viviendas pueden satisfacer las demandas de los consumidores de integración solar, creando una vía fácil de seguir para adaptarse a las cambiantes tendencias de diseño de viviendas.
El Het Nieuwe Instituut en Rotterdam, Países Bajos, inaugura The Energy Show y la Solar Biennale este viernes 9 de septiembre de 2022. En colaboración con Matylda Krzykowski, diseñadora y curadora de The Solar Biennale y los diseñadores solares Marjan van Aubel y Pauline van Dongen, la exhibición presenta una serie de proyectos que exploran el significado y las posibilidades del sol en la sociedad, el medio ambiente y el diseño. Con Europa en medio de una crisis energética, The Energy Show y la Solar Biennale representan una oportunidad para que los diseñadores y el público en general examinen la transición a la energía y la tecnología solar a medida que avanzamos hacia un futuro post-carbono.
Incluir estrategias de sustentabilidad dentro de los proyectos arquitectónicos no es una simple tendencia, es una necesidad. Cada vez somos más conscientes de la importancia de tratar los recursos naturales de forma responsable, así como de comprender los factores climáticos que intervienen en el diseño de un proyecto.
Entre diferentes estrategias, activas o pasivas, la incorporación de la energía solar es una de las más demandadas en el ámbito de la arquitectura residencial. Además de recibir incentivos en diferentes partes del mundo, el uso de sistemas solares lidera la demanda dentro de las soluciones sustentables precisamente porque los beneficios de su instalación se pueden ver en poco tiempo con una reducción de hasta un 95% en el gasto energético mensual. Además, la vida útil de un panel solar puede alcanzar los 25 años, funcionando de forma completamente autónoma y requiriendo solo una limpieza básica una vez al año.
La crisis climática está empujando a los arquitectos a incorporar la energía solar como parte integral de la arquitectura, desde el inicio del proceso de diseño. Esto ha impulsado a las empresas a generar nuevos productos que van más allá de los paneles fotovoltaicos convencionales, ubicados sobre los techos o estructuras de soporte adicionales.
Las previsiones para el futuro son alarmantes. Al menos eso es lo que nos muestra el informe recientemente publicado del IPCC 2021, Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (organismo de la ONU). Según el documento, los cambios climáticos provocados por el ser humano son irrefutables y se agravarán en las próximas décadas si no se hacen esfuerzos para cambiar la situación, afirmando que en un futuro muy cercano se superará el calentamiento de 1,5ºC a 2ºC.
El cambio climático sigue siendo una preocupación primordial en la política, la economía y la investigación científica alrededor del mundo, en particular en lo que respecta a las industrias de la arquitectura y la construcción. Nuestra industria contribuye con el 40% de las emisiones globales, y se prevé que la demanda en el sector de la construcción aumente en un 70% para 2050. La energía renovable es parte del paradigma sostenible del siglo XXI, respondiendo al cambio climático y la degradación ambiental, e impulsando una transformación energética global. Las estrategias de producción de energía renovable son necesarias para mitigar los problemas futuros de seguridad energética, especialmente en un momento en el que las fuentes tradicionales de combustible se vuelven cada vez más escasas, y son parte indispensable del diseño sostenible en la arquitectura.
https://www.archdaily.mx/mx/962708/integrando-tecnologias-solares-en-fachadas-tragaluces-techos-y-otros-elementosLilly Cao
La calefacción solar ha existido en la arquitectura desde la antigüedad, cuando las personas utilizaban paredes de adobe y piedra para atrapar el calor durante el día y liberarlo lentamente durante la noche. En su forma moderna, sin embargo, la calefacción solar se desarrolló por primera vez en la década de 1920, cuando los arquitectos europeos comenzaron a experimentar con métodos solares pasivos en viviendas masivas. En Alemania, Otto Haesler, Walter Gropius y otros diseñaron las viviendas esquemáticas Zeilenbau, que optimizaban la luz solar y, tras la importación de las "viviendas heliotrópicas" a Estados Unidos, la escasez de combustible durante la Segunda Guerra Mundial popularizó rápidamente la calefacción solar pasiva. Las variaciones de este sistema proliferaron entonces en todo el mundo, pero no fue hasta 1967 que el arquitecto Jacques Michel implementó el primer muro Trombe en Odeillo, Francia. Denominado así en honor al ingeniero Felix Trombe, el sistema combina vidrio y un material oscuro que absorbe el calor para conducirlo lentamente hacia la casa.
https://www.archdaily.mx/mx/946740/como-funciona-un-muro-trombeLilly Cao
Aunque se desarrollaron por primera vez durante los años 50 como una fuente práctica de energía, los sistemas solares fueron demasiado caros para su uso corriente hasta los años 70. A partir de su aplicación inicial para alimentar los satélites militares de la era de la Guerra Fría, las células solares fotovoltaicas de silicio lograron su primer éxito comercial en lugares donde no se disponía de electricidad, como faros y plataformas petrolíferas en alta mar.
A medida que crece la preocupación sobre la contribución de los combustibles fósiles al calentamiento global, la energía solar es una fuente de energía cada vez más atractiva, ya que genera cero emisiones y su suministro es infinito. Para los constructores y arquitectos existen muchas opciones que permiten aprovechar la energía del sol en instalaciones comerciales e industriales, y el curso online sobre lo 'bueno, lo malo y lo feo' de los sistemas solares fotovoltaicos en techos, dictado por AEC Daily, podría guiarnos para entender de mejor manera sus procesos y opciones de instalación.
Alguna vez restringida a estaciones espaciales y satélites, la energía fotovoltaica está ganando terreno y se está convirtiendo en una opción cada vez más viable para ser incorporada en la arquitectura. Todos los días, el sol libera una gran cantidad de energía sobre el planeta Tierra, mucho más de lo que consume toda la población. Dejar de aprovechar esta fuente sostenible, renovable e inagotable para generar electricidad es casi contra intuitivo, especialmente si consideramos el impacto ambiental y social de otras formas de generación de energía.
Sin embargo, la tecnología para crear electricidad a partir del sol no es tan simple y todavía tiene algunas limitaciones pequeñas, especialmente en cuanto a precio. La idea de este artículo es explicar algunos conceptos básicos sobre el proceso y destacar lo que es importante tener en cuenta al diseñar un sistema solar.