Cuando se solicita una extensión de un edificio histórico existente, a menudo los arquitectos optan por intervenciones de vidrio, transparentes y reflexivas. Algunos deciden permanecer neutrales y sutiles al tratar con una estructura más antigua, mientras que otros eligen un diseño audaz y abierto para manifestar su carácter contemporáneo. Dado que cada proyecto tiene su propia motivación y razonamiento conceptual, los resultados son diferentes y diversos.
Sigue leyendo para conocer algunos ejemplos relevantes, cada uno respondiendo a un programa diferente.