Abarcando una cúpula geodésica diseñada por Buckminster Fuller y una escultura de Alexander Calder, la intervención muestra cómo la ciudad está repensando sus tesoros de la feria mundial.
El tejido urbano contemporáneo de Montreal, quizás más que cualquier otra ciudad canadiense, fue moldeado por un solo evento en su historia moderna: la Exposición Universal e Internacional de 1967, conocida popularmente como Expo 67. Con su número récord de visitantes, fue La feria mundial más exitosa del siglo XX y alimentó un auge en sector constructivo de la ciudad que se extendió hasta finales de la década de 1970.