Esta pregunta puede ser básica y seguramente conoces la respuesta, pero nunca está demás recordar algunos cálculos elementales que nos ayudan a agilizar el proceso de diseño.
Como sabemos, una escalera está conformada básicamente por una serie de escalones, los que a su vez se componen de una huella (su parte horizontal, donde se apoyará el pie) y una contrahuella (su parte vertical). Aunque puede variar en su diseño, cada escalón debe además contar con uno o más descansos, un pasamanos y un pequeño voladizo que sobresale de la huella por sobre el escalón inferior, permitiendo aumentar su tamaño sin sumar centímetros a las dimensiones generales de la escalera.
Revisa la efectiva fórmula desarrollada por el arquitecto francés François Blondel, que permite determinar las dimensiones correctas de una escalera cómoda y eficiente según su uso.