Los revestimientos de terrazo se fabrican a través de una base cementicia –arena, agua y cemento– mezclada con diversas piedras naturales granuladas, y pueden aplicarse en cualquier tipo de superficie horizontal o vertical. La técnica, producida a partir de un proceso totalmente artesanal, fue ampliamente utilizada en edificios modernos en todo el mundo y tiene como principales ventajas su durabilidad, resistencia (al agua y abrasión), y su fácil mantenimiento, siendo comúnmente aplicado en pisos de casas y halls de edificios residenciales y comerciales.
Actualmente, el terrazo parece estar de regreso y se presenta como una fuerte tendencia en la arquitectura contemporánea. Revisemos su composición y algunas de sus aplicaciones en proyectos recientes.