Hacer más accesible y cercana la relación de los ciudadanos con el agua en los entornos urbanos es uno de los objetivos que podemos reconocer en decenas de proyectos alrededor del mundo.
En su mayoría, estos planes se pueden enfocar en bordes costeros y en ríos, siendo ejemplos de estos los proyectos que impulsan París para construir más espacios públicos en torno al río Sena, y Moscú, para integrar el río Moscova en la cotidianidad de la capital rusa.
No obstante, existen otros proyectos de menor escala que hacen posible que los habitantes se relacionen con este recurso mientras están en sus ciudades, ya sea incluyéndolo como un elemento paisajístico o bien como reflejo de un principio de sustentabilidad.