La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) señala que más de la décima parte de la población mundial, aproximadamente 800 millones de personas, practican la agricultura urbana en todo el mundo. En los Estados Unidos, millones de ciudadanos carecen de acceso a supermercados. Los agricultores urbanos desempeñan aquí un papel crucial en la solución de los problemas de seguridad alimentaria en las ciudades.
Históricamente, la distancia entre las zonas rurales y urbanas nunca ha sido mayor, lo que hace que las fuentes de alimentos rurales tradicionales sean considerablemente inaccesibles. Las ciudades se desarrollaban alrededor de mercados centralizados que llevaban productos de las tierras de cultivo a los centros urbanos. Hoy en día, la agricultura urbana está revitalizando esta conexión entre los habitantes de la ciudad y los productos agrícolas.