Esta frase llamó la atención durante la conferencia de Diébédo Francis Kéré en el AAICO (Congreso Internacional de Arquitectura y Arte), que tuvo lugar en Oporto, Portugal, entre el 3 y el 8 de septiembre de 2018. Tras ser presentado nada menos que por Eduardo Souto de Moura, Kéré inició su intervención con la sencillez y la humildad que guían su trabajo. Sus obras más conocidas se construyeron en lugares muy remotos, donde los materiales son escasos y la mano de obra son los propios vecinos, utilizando recursos y técnicas locales.