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Arquitectos: Passos Arquitetura
- Área: 256 m²
- Año: 2017
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Fotografías:André Mortatti
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El principal desafío de este proyecto fue traer al espacio una sensación de hogar, donde el contacto con la naturaleza siempre puede estar presente. Por esta razón, se eligió el uso de texturas naturales y la mejora de la iluminación natural, en la que predominan los colores claros que contrastan con el verde presente en los jardines.
El proyecto se realizó como un experimento para aplicar elementos de la arquitectura japonesa: una composición ligera, uso de materias primas y sus propias texturas naturales, así como tsuboniwa y shakkei como concepto de paisaje.
Tsuboniwa es un elemento común en la arquitectura japonesa desde el siglo VIII, pero con el tiempo se modernizó. Se puede entender como espacios de vegetación privados y cerrados dentro de la residencia, algo parecido a los jardines de invierno. Este elemento se aplicó en el área social del departamento, como una conexión visual entre la sala, el comedor y la cocina.
Por otro lado, Shakkei podría traducirse como "paisaje prestado", cuando el proyecto utiliza elementos del fondo para componer la arquitectura y el paisaje. En el balcón, podemos ver la copa de un árbol extravagante, y el proyecto del paisaje lo tomó como el concepto de diseño para crear un jardín a través de todo el balcón. Resulta en una disposición entre elementos interiores y exteriores, como una vasta área verde dentro de un departamento situado en una zona completamente urbanizada de São Paulo.
Con la renovación del departamento, el área social se ha convertido en un gran espacio de vida para los residentes. Cocina, comedor, sala de estar y TV están unidos y directamente conectados al jardín del departamento. Es importante decir que, si es necesario, la cocina puede aislarse de los demás ambientes mediante las puertas giratorias de vidrio que permiten el paso de la luz, pero bloquean la vista de las personas que se encuentran en la habitación.
En el área social, se eligió el piso de madera de roble americano, que armoniza con la carpintería de madera natural de Paricá. Las paredes originales de la fachada estaban peladas y pintadas de blanco, aportando una sensación rústica al medio ambiente. Los colores del entorno están dados por el verde del paisaje y los pequeños reflejos de la decoración.
Además del diseño de toda la carpintería del interior, también se diseñaron algunos de los muebles presentes en la habitación, como el sofá y la mesa del comedor. Sobre el sofá, podemos decir que fue diseñado para convertirse en el centro de integración y conexión del entorno. Tiene múltiples funciones y puede usarse tanto para momentos de relajación como para momentos de conversación y socialización. La mesa, por otro lado, tiene una estructura de carpintería con montaje hecho en base a accesorios, inspirada en la carpintería japonesa. Tiene un diseño simple y ligero, adaptándose a los más diversos tipos de ambientes.