El complejo del World Trade Center en Lower Manhattan está progresando lentamente, ahora más de una década después del 11 de setiembre. El Memorial se dio a conocer en el décimo aniversario del 11 de setiembre, mientras que la Torre de la Libertad está casi terminada, mostrando con orgullo la aguja que se montó hace apenas unas semanas. El sitio todavía es - y será por muchos años por venir - una formación expasperante de equipos de construcción, andamios y grúas, trabajando afanosamente en los diversos componentes de la reconstrucción del World Trade Center. Sin embargo, mientras todo este desarrollo avanza, el costo de la construcción crece.
Según un artículo publicado en The Observer, el sitio cuenta ahora con uno de los edificios de oficinas más caros del mundo - la Torre de la Libertad - y uno de los aparcamientos más caros en la historia - el Centro de seguridad de vehículos. Y para agregar a esta muestra grandiosa de la perseverancia de la ciudad de Nueva York sobre la tragedia, el centro de transportes de Santiago Calatrava - la estación de la Autoridad Portuaria a Nueva Jersey - se ha convertido en un punto de contención muy controvertido por su presupuesto que asciende vertiginosamente, ahora reportado en $ 3470 millones aún dos años antes de su término. Este puede ser uno de los centros de transporte más caros del mundo, teniendo en cuenta que su volumen de pasajeros no justifica este gasto tanto como su ubicación.
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En medio de las emociones fuertes poco después de 11 de setiembre, la aprobación del proyecto ha aumentado su importancia en el centro de la zona cero. La inspiración para el diseño, Calatrava dice, es un niño liberando un pájaro. Desde entonces, el diseño ha pasado de ser un "pájaro en vuelo" a un "estegosaurio inmovilizado" para satisfacer las limitaciones presupuestarias. Pero trabajando desde el extremo opuesto el alcance del trabajo que la Autoridad Portuaria ha integrado en la construcción del proyecto causó su precio se dispare.
Para ayudar a financiar el centro, la Autoridad Portuaria desvió fondos de su plan de capital a 10 años, socavando sus propios proyectos de transporte regionales. "Desde el túnel ARC ferroviario propuesto bajo el Hudson en Midtown (cancelado por Chris Christie en 2010) y una extensión del tren PATH hacia el Aeropuerto Internacional Newark Liberty (a un costo de alrededor de $ 500 millones), hasta una profunda renovación del aeropuerto de La Guardia ($ 1000 millones en fondos se redujeron en 2009), la región tiene necesidades, y la Autoridad Portuaria está luchando para financiarlas", escribe Stephen Jacob Smith de The Observer.
Inicialmente, el proyecto iba a ser financiado por la Autoridad de Transporte Federal, que prometió una suma de aproximadamente $ 1900 millones de dólares antes que los verdaderos costos del proyecto se hicieran evidentes. Es importante tener en cuenta cómo los proyectos en el World Trade Center son únicos en el sentido de que eran, y siguen siendo, impulsado por las emociones asociadas con los ataques del 11 de setiembre. Este gran símbolo del capitalismo y el libre mercado, un centro financiero de integridad y autoridad global, fue devastado sin previo aviso. La percepción de la seguridad y la estabilidad se hizo añicos. ¿De qué otra manera se puede recuperar este símbolo de perseverancia americana, que reconstruyendo un centro financiero que es igual medida un monumento, memorial, y símbolo de la fortaleza financiera?
En resumen, según Smith, estas percepciones del futuro del área, permitieron al proyecto exceder el alcance de lo que el FTA podría financiar en circunstancias normales. El alcance del centro, que cae dentro del presupuesto del FTA y de la Autoridad Portuaria, incluye la infraestructura común, como una terraza sobre el centro que fue construida para apoyar el memorial encima, los costos de infraestructura en la calle Greenwich, imprecisamente asociados con el proyecto, y pasadizos peatonales que conectan a edificios de oficinas privadas fuera del sitio. Cabildeo y relaciones políticas empujaron la financiación de estos componentes a ser facturados a la Autoridad Portuaria.
La decisión definitiva para los problemas presupuestarios fue entre el tiempo y el dinero. Los elementos integrados en gran medida del World Trade Center hicieron que el centro fuese parte de la base, tanto para el Memorial y el terreno sobre el que se asienta la Torre de la Libertad. Siguiendo con la promesa de abrir el Memorial en 2011 significó que la construcción del centro debía ser postergada lo suficiente para construir una cubierta que apoyaría el Memorial, incrementando los costos. La impaciencia por la construcción de otros aspectos del proyecto tuvo el mismo destino, por lo que el deseo del gobernador Eliot Spitzer de recortar gastos renunció con él cuando David Paterson asumió el poder y la necesidad de avanzar con la construcción se volvió lo más importante.
El diseño caro de Calatrava no fue modificado después de su conversión inicial de ave a estegosaurio. Incluso con los recortes iniciales de diseño, el precio del proyecto, el doble del costo en que se ofertó en un principio, conlleva el costo de esas otras instalaciones de la Autoridad Portuaria que siguen necesitando mantenimiento - "túneles de North River a Midtown de 100 años de antiguedad, el decrépito aeropuerto de La Guardia," o retrasos y escasez a lo largo de las líneas de tren PATH. En aproximadamente dos años los neoyorquinos verán lo que es un centro de tránsito de $ 4000 millones. Tal vez entonces se justificará el gasto.
