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Arquitectos: Studio Arthur Casas
- Área: 2000 m²
- Año: 2013
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Fotografías:Fernando Guerra | FG+SG
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La Librería Saraiva fue pensada como un híbrido entre una plaza y una biblioteca, un lugar de convivencia, el ocio, la concentración y el reposo al mismo tiempo. Una arquitectura simple y acogedora, y que tiene como objetivo desaparecer detrás de los libros para que la mente se eleve sobre su contenido. Un espacio del siglo 21, los libros y los nuevos medios de comunicación comparten los estantes, exigiendo un alto nivel de flexibilidad de diseño. Tanto organizar esta gran cantidad de información sin necesidad de crear una tienda monótona, como estimular a la gente a quedarse, leer e interactuar en un ambiente acogedor, fueron unos de los objetivos del proyecto.
Situado en el interior de un centro comercial en Río, la tienda se divide en cuatro plantas. Los visitantes entran a través de un espacio de doble altura, donde los estantes y vitrinas parecen flotar a fin de destacar los libros y los objetos. Algunos estantes están suspendidos por rieles para que el diseño pueda adaptarse a diferentes configuraciones. El piso de cerámica fue desarrollado específicamente para que esta tienda fuera más reflexiva y se acentuara la liviandad de la losa. La madera, presente en todos los espacios, es el escenario ideal para la variedad de colores y texturas de los objetos y, aunque neutral, aporta calidez y confort.
Los expositores fueron pensados para que una u otra obra no prevaleciera sobre otra. Los ojos del visitante viajan a diferentes alturas, con espacios ocupados por los objetos que hacen referencia a diferentes temas. Las espinas inferiores están diseñadas para que el usuario pueda ver los títulos que están más cerca del suelo. Los sillones y reposapiés impregnan las rutas de la librería, una exposición mixta de algo de la historia de nuestro diseño y una invitación para que los lectores concentrados o dispersos se olviden del tiempo.
Si las secciones literarias especializadas y generales, se centran en la planta baja y el entresuelo, el espacio multimedia, cafetería, auditorio y zona de juegos infantiles se encuentran en el subsuelo. La escala de grises permite un mayor énfasis en el contenido de los nuevos medios y que los expositores orgánicos se adapten mejor a la interacción con los diversos medios de comunicación.
En el espacio infantil, la neutralidad del resto de la biblioteca se rompe con una rampa orgánica multicolor, invitando a los niños a ir a los títulos de forma dinámica mientras se transforma la escala del espacio para su tamaño. Los nichos superiores son una interpretación lúdica del vocabulario utilizado en las otras secciones, creando un mundo aparte.
