En la presente colaboración, la arquitecta Amanda Rivera narra la experiencia del equipo de profesionales de la Escuela de Construcción en Tierra ECoT -de la cual es fundadora- tras analizar el estado de las viviendas de adobe afectadas en la localidad de Canela por el reciente terremoto de magnitud 8,4 en Chile. La ausencia de una formación educacional sobre la construcción en tierra "genera reiteración en la ignorancia (de demoler viviendas en buen estado), y por lo tanto, una reiteración en esta irresponsable acción", explica Rivera.
El pasado 16 de septiembre de 2015 se desató en la costa de la región de Coquimbo (Chile) un terremoto de magnitud de 8,4 en la escala sismológica de magnitud de momento. En la comuna de Canela -epicentro del sismo- y en sus alrededores, las edificaciones construidas en tierra representan entre un 80% y un 90% del total, principalmente en adobe.
El adobe es una técnica constructiva que data de por lo menos 11 mil años de antigüedad, y que en Chile representa una gran parte del patrimonio construido. El adobe es un bloque de tierra y agua, que generalmente tiene paja y se le da forma a través de un molde. Es un ladrillo sin cocer, que luego se apareja como una albañilería. De hecho, es una albañilería de tierra cruda, que en Chile tiene particularidades antisísmicas probadas.