Probablemente todos los que vivan en una gran ciudad deben haber soñado alguna vez con vivir completamente aislados, en una casa entre los árboles o en una playa desierta. Durante la pandemia y los interminables meses de cuarentena, muchos tuvieron la misma idea. Por muy romántico y seductor que pueda parecer, esto conlleva algunos desafíos prácticos importantes. Difícilmente renunciaríamos a las pequeñas comodidades a las que estamos tan acostumbrados, como abrir un grifo o cargar nuestro teléfono celular. Si la ubicación es remota, es posible que no tengamos acceso a electricidad, agua potable, gas, alcantarillado y recolección de residuos sólidos. Pero existen varias posibilidades para alcanzar una vida con comodidad y sin vecinos. ¿Cuáles son las principales soluciones y cómo puede un proyecto arquitectónico proporcionar una vida fuera de la red?
Arquitectura y paisaje: casas para entender los distintos territorios de California
Ubicado en la región oeste de los Estados Unidos, el estado de California es el estado más poblado y el tercero más extenso. Dentro del territorio se encuentran algunas de las áreas más pobladas del país como son Los Ángeles, San Diego, San Francisco, Long Beach y Oakland.
Ventanas correderas: ¿cómo mejorar un espacio con su uso?
Las ventanas correderas, también conocidas como corredizas, son ventanas con marcos que se deslizan hacia los lados, permitiendo grandes vanos que mejoran considerablemente la iluminación y ventilación de un espacio.
Tienen un aspecto limpio y elegante, y su uso tiene varias ventajas a la hora de diseñar: permiten enmarcar grandes vistas y hacer énfasis en la naturaleza. Por otra parte, al usarlas como cerramiento es posible generar una mayor fluidez entre los espacios interiores y exteriores, ampliando la percepción del tamaño de las áreas comunes al abrir las ventanas hacia otros espacios del proyecto, o bien, al exterior.
Si buscas ideas de cómo incorporar ventanas correderas, conoce los 23 ejemplos que presentamos a continuación.