Con una alta proporción de blanco mezclado con una pequeña cantidad de pigmentos coloridos, los colores pastel brindan una gama de tonos pálidos y tenues. Relacionados con ambientes relajantes y relajantes, estos colores tienen una calidad atemporal y se pueden ver en diferentes estilos arquitectónicos, como el rococó, el art déco o los años modernos de mediados de siglo. Aplicados en exteriores, interiores o ambos, los tonos pastel hacen que las habitaciones se sientan más luminosas, aireadas y espaciosas.
Desde acentos sutiles hasta llamar la atención en la estrategia general de un proyecto, los colores pastel son una alternativa versátil que se puede usar de múltiples maneras y en diversos grados. Siguiendo las propuestas de color de Ricardo Bofill, los interiores de Paulo Mendes da Rocha y los edificios de Michael Graves, la arquitectura contemporánea juega con colores suaves con fines estéticos y funcionales, además de brindar una experiencia sensorial. Analizando diferentes ejemplos de su aplicación en arquitectura y diseño, mostramos cómo cuatro colores predominantes –verde menta, rosa pálido, amarillo limón y azul claro– están subiendo al escenario actualmente.
Tonos pastel monocromáticos
Usando estrategias de color enfocadas en un tono pastel, los interiores monocromáticos buscan brindar integridad en todo el diseño mientras expresan suavemente la personalidad de un espacio. Desde un papel completamente dominante hasta enfatizar delicadamente ciertos elementos, esta estrategia permite una amplia gama de posibilidades creativas. Debido a que la composición de los colores pastel es principalmente blanca, su presencia en el diseño de interiores puede crear un fondo relajante que permita que otros elementos, materiales y texturas se destaquen. Alternativamente, al incorporar varios tonos y acabados de un solo color, el espacio puede impregnarse de una sensación de profundidad, ya que sus variaciones más claras y más oscuras interactúan entre sí. A lo largo de diferentes usos y tipologías de construcción, los tonos pastel monocromáticos están presentes tanto en proyectos de nueva construcción como de renovación para uso residencial, de oficinas y comercial.
Residencial
Cubiertas verde menta que optimizan el espacio
El color como guía para la estética interior
Oficinas
Techo, paredes y muebles pintados
Uso de azul claro para enfatizar elementos
Comercial
Jugando con suaves tonos de rosa
Uso del color para realzar la identidad del edificio
Mezclando y combinando colores
Además de las estrategias monocromáticas, existen varios enfoques para combinar colores pastel en el diseño de interiores, como complementarios para crear contraste, análogos para un efecto cohesivo y armonioso, y una selección de esquemas de colores triádicos para espacios dinámicos. Dado que estos colores tienden a tener tonos más claros, se pueden combinar fácilmente entre sí, a pesar de que existen algunas combinaciones comunes en el uso de tonos pastel. Si bien se potencia la funcionalidad de un espacio, experimentar con las combinaciones de colores –previa consideración de las dimensiones, la luz natural y la materialidad del espacio– tiene un efecto poderoso en la atmósfera general creada. Estas combinaciones siguen tanto una estética simple como buscan funciones específicas, como crear un hogar tranquilo y cálido para la salud de un perro querido.
Residencial
Bloqueo de color pastel
Atmósfera relajante para la casa del perro
Comercial
Tonos pastel para un toque dulce
Tonos suaves para un flujo continuo entre espacios
Combinando materiales, texturas y acabados
Más allá de las pinturas para pisos, paredes y techos, los colores pastel también están presentes de forma natural –o artificial– en diversos materiales de construcción. Potenciando la riqueza del interiorismo, la combinación de materiales en tonos pastel aporta diferentes texturas –añadiendo profundidad e interés visual–, además de crear contrastes para resaltar determinados elementos. Aunque predominan los interiores pastel contemporáneos con texturas suaves, brillantes y rústicas, estos pueden combinarse con materiales naturales (madera, piedra, cuero), tejidos texturados (lana, lino, terciopelo), superficies decorativas (papel pintado, azulejos) y superficies rugosas. Fortaleciendo el carácter del edificio, estas interacciones dinámicas crean contrapuntos, equilibran y juegan con diferentes escalas.
Comercial
Ladrillos, tejas y cerámica
Mezcla de materiales antiguos y nuevos
Residencial
Incorporación de materiales estructurales expuestos con acabados contemporáneos
Combinación de madera, baldosas de cerámica y tonos pastel para texturas superficiales
Baldosas estampadas para paredes y pisos
Desde hace más de miles de años –remontándonos a civilizaciones antiguas como la egipcia, la persa y la romana– la cerámica se ha utilizado como elemento de diseño de interiores. Con avances modernos que los han hecho más funcionales y accesibles a un público más amplio, estos azulejos han establecido una presencia dentro de los espacios residenciales y comerciales. Con una amplia gama de estilos, colores y posibilidades de patrones que agregan carácter a un espacio, hoy en día los azulejos son conocidos por ser un elemento versátil tanto para fines funcionales como estéticos. Ya sean cuadrados, rectangulares o hexagonales, la elección de tonos pastel para los mosaicos repetidos permite que estos patrones creen un lenguaje arquitectónico sin invadir completamente un espacio. Además de usarlos para diferenciar áreas, los mosaicos con motivos pastel también son una estrategia para dar una suave continuidad al proyecto general.
Residencial
Bóvedas de cerámica restauradas
Un sutil toque de azul claro
Comercial
Azulejos con diferentes colores y diseños
Suelo de rombos amarillos
Incorporando tonos pastel al tejido urbano
Como los colores pastel se pueden encontrar en diferentes materiales y texturas, existen múltiples formas de aplicarlos en los exteriores de los edificios. Al igual que la famosa paleta de colores de Notting Hill, la integración de colores pastel como parte del tejido urbano permite la integración de un atractivo funcional y estético. Mientras evocan calma y tranquilidad a través de un ambiente urbano suave y cohesivo, estos colores claros son ideales para regular la temperatura dentro del edificio. Al agregar una pequeña cantidad de pigmentos de color en pinturas o materiales de construcción, como el concreto, se pueden crear tonos pastel con diferentes texturas para crear una personalidad única para el edificio. Los tonos pastel pueden cubrir toda la fachada o, combinados con otros materiales, pueden crear diseños exteriores dinámicos y contrastantes.
Residencial
Combinando verde con cobre
Hojas corrugadas en azul claro
Institucional
Una escuela en rosa pálido
Colorear un volumen geométrico
