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Arquitectos: Bez+Kock Architekten
- Área: 2133 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Stephan Baumann, bild_raum
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Proveedores: Holzkraus GmbH Schweinfurt, RAICO, Sohm Holzbautechnik
¿Puedes imaginarte un lugar más encantador para la construcción de una guardería? El jardín del antiguo monasterio franciscano construido en el siglo XVII es un oasis verde en el centro histórico de Miltenberg. Un lugar que combina centralidad y cobijo de forma ideal: situada a pocos pasos de Engelplatz, en el centro de Miltenberg, la nueva guardería está protegida por el imponente muro de arenisca roja que encierra el jardín del antiguo monasterio franciscano.
Al mismo tiempo, este jardín es también un lugar sensible con una gran historia, un lugar que tiene algo que contar, un aspecto no del todo carente de importancia en la educación y la enseñanza de valores a nuestros hijos. Sólo por esta razón, su desarrollo con una guardería requiere cautela y precisión.
El nuevo edificio se diseñó como un pabellón de madera de una sola planta que encaja perfectamente entre los muros históricos del monasterio: su área se divide en el jardín existente en la zona protegida de juego libre de la guardería y un espacio abierto de acceso público que -en consonancia con el espíritu del antiguo jardín del monasterio- está a disposición de los residentes de Miltenberg. Con su suave gradación en altura, el edificio sigue la topografía ligeramente inclinada del terreno y logra así una integración comedida y natural del nuevo edificio en su entorno.
A lo largo de los dos laterales de la guardería, una pérgola continua crea una zona delantera protegida de la intemperie para jugar y pasar el tiempo. Las salas del centro familiar se desarrollan en torno al patio interior ajardinado en la interfaz con la guardería. La gran sala polivalente, disponible para ambos grupos de usuarios y orientada hacia el lado de la entrada, también se colocó justo al lado.
La guardería se construyó como un edificio estructural de madera con superficies visibles sobre un forjado de hormigón in situ. La madera, un material renovable y disponible en la región, forma el núcleo de la estructura del edificio; es robusta, de alto rendimiento y acogedora. Finos listones verticales de abeto plateado revisten las fachadas de la guardería. La mampostería de arenisca roja local del muro histórico del monasterio forma el característico cerramiento exterior del nuevo interior. Las cualidades hápticas y atmosféricas de la arenisca y la madera hacen de la guardería una casa para tocar y agarrar, también en la zona protegida de juego libre, que cuenta con elementos de juego de madera desarrollados individualmente.
Elementos de fieltro de colores vivos orientan a los niños en el interior. Las claraboyas de gran formato acentúan la zona de acceso a los distintos grupos del jardín de infancia y crean una atractiva situación de luz natural para los guardarropas, que se construyeron en nichos ampliados. Cada sala tiene un elemento de escalada integrado que se eleva como mirador por encima de las zonas verdes del tejado. Los niveles superiores están cerrados únicamente por una ligera red de acero, por lo que ofrecen la máxima transparencia. Aquí se han creado retiros para los niños que les inspiran a soñar, leer, observar o reflexionar con vistas al monasterio directamente adyacente.