Desde los hongos a la arquitectura, así se presenta el equipo de Mushbio, un panel de revestimiento decorativo inspirado en Los Andes. Este se fabrica mediante diseño paramétrico y su materialidad es en base al micelio de hongos. Además de aportar a la identidad cultural a través de su diseño que busca modelar la topografía del territorio ecuatoriano y latinoamericano, el panel posee cualidades termoacústicas, ligereza y una belleza única, llevando la naturaleza a los espacios interiores.
Tras ganar el Fonquito, capital semilla de la ciudad de Quito, pudieron mejorar la infraestructura y equipamiento para desarrollar su producto de forma más óptima. Los paneles son de 25x25x5 centímetros y pesan aproximadamente 400 gramos. El proceso de producción es en base a moldes desarrollados con fabricación digital. El color y la textura que adquieran los paneles depende del proceso de maduración del hongo, así obtienen una gama de colores entre blancos, ocres y cafés. Actualmente cuentan con tres modelos: Cordillera, Ribera y Valle.
La primera colección de paneles “Voronoi”, fue lanzada oficialmente al mercado en abril de 2022 mediante la plataforma de exposición Casas Project 2022 en Quito, una de las más importantes de la industria de arquitectura, diseño y decoración. Bajo la premisa “El Futuro es Fungi”, se propone el futuro del interiorismo a través del encuentro de la ciencia y el diseño.
Usamos la inteligencia natural de los hongos para transformar residuos agroindustriales locales en productos biotecnológicos para el diseño de interiores. Empleamos paneles modulares, mobiliario, luminaria que facilitan la experiencia de habitar espacios interiores armónicos, mejoran la productividad, disminuyen el estrés y al final de su vida útil son fácilmente compostables" - Equipo Mushbio.
Este proyecto nació a partir de 3 amigos que luego se convirtieron en socios. Andrés, Renata y Fátima, cada uno desde su área de estudio, (arquitectura, diseño Industrial y diseño gráfico) realizaron sus tesis de pregrado en base a temas relacionados con sustentabilidad, economía circular, biomateriales y optimización de recursos, destacando principalmente la tesis de Renata, como base para la materialización de Mush la cual trataba de un revestimiento de paredes alternativo para espacios interiores de locales comerciales.
Desde 2018 inician una investigación en base a hongos, en conjunto con cultivadores de comestibles, con el fin de estandarizar los procesos de cultivo y el desarrollo de sistemas constructivos con hongos. Luego de 3 años de desarrollo tecnológico, el equipo multidisciplinario decide consolidar el proyecto en 2021, asentando los biomateriales a la realidad del mercado para brindarle a las personas los beneficios sostenibles que entrega el mundo natural.
"Ahora más que nunca valoramos los espacios verdes y la brisa fresca del exterior junto con las demás maravillas del mundo natural que está fuera de la ciudad. Pero, ¿Por qué tener que salir/alejarnos de la ciudad para encontrar esa conexión?, ¿Por qué no podemos reinventar o revolucionar el habitar de los espacios urbanos?, ¿Por qué no observamos a la naturaleza con sus espacios megadiversos en los que millones de especies coexisten en un equilibrio armónico?" - Extracto del Manifiesto Mush.
Luego de participar en Casas Project, se abrieron nuevas oportunidades para el equipo, exponiendo piezas de mobiliario y esculturas en la galería de arte de Nuluxo ubicada en la ciudad de Cuenca y la intervención para aportar a la identidad culinaria del restaurante de autor “Quitu”, con 32 unidades de la Colección Voronoi. También el equipo se encuentra en proceso de certificación de carbono neutro para apuntar de manera directa a ámbitos de la arquitectura y la construcción.
