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Arquitectos: VS arqs
- Área: 644 m²
- Año: 2021
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Fotografías:Federico Cairoli
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Proveedores: ACINDAR, Aluar, Artecnica, AutoDesk, Blangino, Flas, Paraná 201, Roca, Ruta 4, Triangular, Trimble Navigation, Vitrowall
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El edificio ocupa un terreno de ancho típico y poca profundidad (8,66 m. x 22 m.) en el barrio de Colegiales de la Ciudad de Buenos Aires.Se trata de un barrio predominantemente residencial con un marcado proceso de densificación desde hace ya unos años.
El proyecto agrupa cuatro viviendas y un estudio organizados en dos bloques divididos por un patio. A pesar de ser todos diferentes en su conformación y metraje, tienen como denominador común la forma de ingresar a través de un zaguán que marca la transición entre el adentro y el afuera, construyendo un umbral intermedio entre la calle, las galerías comunes y la vivienda privada.
Las galerías comunes y la escalera se posicionan transversalmente a la profundidad del lote, proponiendo un recorrido de cambiantes condiciones lumínicas y de escala, para rematar, en la cuarta planta, en un techo vidriado que desdibuja el límite horizontal.
Este recorrido propone, tanto por sus dimensiones como por su disposición estratégica, lugares de vida comunitaria que favorecen el intercambio social entre vecinos como también expansiones y usos diversos.
El núcleo del ascensor de hormigón texturado (acanalado) marca un contrapunto vertical a las galerías horizontales que acompañan la circulación y los espacios de ingreso.
Tanto en las fachadas como en las caras internas de los espacios comunes se trabajó con una malla metálica reticulada a modo de filtro formando varias capas yuxtapuestas en el espesor de la envolvente. La malla está compuesta por varillas de acero aletado. Se aprovecha la flexibilidad del material para construir límites de distintos espesores y grados de transparencia según la necesidad y ubicación. Estas mallas conforman rejas de protección, parasoles, barandas y pantallas. Entre las capas de mallas del frente y contrafrente y el cuerpo de hormigón se deja un espacio que permite incorporar la vegetación como parte del lenguaje. Las sombras proyectadas por el sistema de las fachadas se modifican continuamente, según el momento del día, incorporando el tiempo como una dimensión más del espacio.
Delimitar el edificio bajo estas premisas permite pensar en una pieza urbana sostenible, sin necesidad de agregados posteriores que terminan alterando el paisaje de la ciudad.