La importancia de la arquitectura orientada hacia la sostenibilidad, lleva a los arquitectos a explorar nuevas alternativas de materiales de construcción sostenibles que se puedan implementar en las nuevas edificaciones. La investigación “La totora como material de aislamiento térmico: propiedades y potencialidades” fue publicada por la arquitecta Leyda Aza Medina como tesis de maestría en el 2016 y ganó el premio de prácticas académicas ADUS 2021. El estudio da una alternativa sustentable, utilizando como base el recurso renovable de la totora para el uso de aislantes térmicos en edificaciones presentes en el altiplano peruano.
Ubicada en el altiplano peruano, la ciudad de Puno se encuentra a una altura promedio de 3 827 m.s.n.m junto al lago Titicaca, la masa de agua navegable más alta del mundo. Este alberga a la comunidad indígena de los uros, caracterizados por construir sus propias islas, viviendas y transportes acuáticos a base de totora. Es en esta locación (de bajas temperaturas), que en el perímetro de los cuerpos de agua presentes se da el crecimiento natural de la totora, una planta acuática que crece en abundancia con un aproximado de dos millones de toneladas anuales.
Este sector del Perú presenta altos índices de pobreza y es un lugar que se caracteriza por las alcanzar bajas temperaturas junto a viviendas autoconstruidas con un bajo nivel térmico. Es en base a lo previamente explicado, que Leyda Aza propone la creación de paneles que funcionen como aislante térmico de origen natural a base de totora. Este tendría la propiedad de ser biodegradable y renovable debido a su composición vegetal de rápido crecimiento, por lo que se espera contribuir a reducir el impacto ambiental dado por el sector de la construcción. Asimismo, se concibe que el material sea de bajo coste de fabricación, debido a la proximidad y fácil acceso a los materiales requeridos desde el altiplano peruano.
Es en este punto donde la arquitectura tiene un rol de gran importancia, ya que es el arquitecto el encargado de proponer nuevos materiales para mejorar los modelos de habitar. Por consiguiente, el nuevo material propuesto fue sometido a una serie de ensayos que demuestran que no solo tiene una conductividad térmica competente de 0.046 a 0.058 W/MK, sino que también presenta grandes características como la resistencia a la manipulación, permeabilidad al vapor de agua y aire y un buen comportamiento de autoextinción ante el fuego, que lo vuelven un material ecológico relevante para su uso en el sector de la construcción.