El equipo de Cazú Zegers Arquitectura nos comparte el nuevo registro de sus tres obras chilenas Casa Ye, Casa Llu y Casa del Fuego. Capturadas bajo la cámara de ClaraFilms, se buscó incorporar la dimensión humana y dar cuenta de cómo se viven los espacios a través del paso del tiempo.
Clara Larraín, integrante del equipo, nos escribe el siguiente texto acompañando la visión de la arquitecta para englobar el sentido de estos tres videos de manera poética:
Los proyectos de arquitectura son obras vivas, el arquitecto diseña algo que imagina en su cabeza y especifica con prolija exactitud cómo su diseño cobrará vida, lo dibuja en programas usando máximas tecnologías, hace prototipos y maquetas y va construyendo verdaderos castillos en el aire que son perfectos.
Sin embargo la obra sufre muchísimos cambios propios de la práctica al pasar del mundo de las ideas al plano físico, y luego una tercera vez al ser habitada. Las obras construidas son seres vivos, que reaccionan al paso del tiempo y a su interacción con el territorio, el clima y sobretodo los seres humanos.
El desafío que nos hemos planteado como oficina - Cazú Zegers Arquitectura- es encontrar una nueva manera de registrar nuestra obra, donde prime la acción de habitar más que el habitáculo en sí mismo. Ya no buscamos replicar la forma prístina del render, pero en versión real, sabemos que en el proceso de construcción se toman decisiones, los proyectos cambian, lo que pensó uno ahora le pertenece a otros y se construye con la colaboración de muchos, dando paso a algo mucho más complejo que una construcción.
Buscamos incorporar la dimensión humana en el registro de la obra y sobretodo dar cuenta de cómo se viven los espacios buscando en cada uno, eso que nos hace querer estar ahí, esa sensación de calidez y hogar que nos da la buena arquitectura, además de incorporar lo que no pensamos, el paso del tiempo, los arreglos, el cambio de materiales y las maneras de vivir la obra que tienen las personas y que fueron posibilitadas por un arquitecto aunque muchas veces no las pensó de la misma manera. Queremos aportar también a la desmitificación de los espacios y de la perfección inalcanzable que se viene mostrando en el registro de arquitectura, tan propio de una cultura del progreso. Estamos en un cambio social y las maneras de aproximarse a la obra arquitectónica también están cambiando.