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Arquitectos: Miguel de la Torre Arquitectos
- Área: 194 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Jaime Navarro, Jorge Garrido
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Proveedores: Comex, Fester, Interceramic, Adobe, AutoDesk, Cappa, Muro Blanco
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Concepción Beistegui 811 está ubicado en la colonia del Valle, al sur de la Ciudad de México, zona que ha vivido múltiples cambios desde sus inicios y la cual hoy se destaca por ser una de las áreas con mayor desarrollo e infraestructura de comunicación, transporte y servicios del país.
La vida barrial en la zona es muy enriquecedora, bien se puede tener acceso desde un mercado hasta grandes centros comerciales, parques, vías para ciclistas y en general es una zona arbolada como pocas en CDMX.
Hay dos condicionantes que están cambiando la forma de vivir en la ciudad, una es la movilidad y otra es el tiempo que la gente pasa en sus hogares, el edificio responde a estas dos premisas. En esta zona la conectividad con la ciudad, la forma en que los ciudadanos se mueven y a dónde se mueven ha ido cambiando, es por esto que el uso de bicicletas ha proliferado y es un tema que se tomó seriamente en este desarrollo. Por otro lado, los usuarios se han diversificado, el diseño funcional al interior considera tanto a una familia tradicional como a gente soltera y/o a quienes comparten vivienda, a los que solo duermen ahí hasta los que trabajan desde casa.
Crear ciudad es algo con lo que estamos comprometidos, adaptarnos al contexto, ser parte de skyline, permearnos con el sitio, con los usos, con los materiales, con la naturaleza, engrandecernos y pertenecer a la zona, aportando mediante el diseño de la fachada nuestra versión de la vivienda, respondiendo a nuestro momento en la historia.
Las plantas corresponden al aprovechamiento de la orientación, crear la optima solución que facilite la habitabilidad, que ventile e ilumine de manera natural para usar en su mayoría recursos naturales, ésta es la forma en la que creemos y creamos nuestra propia consciencia sustentable, integramos al diseño de las instalaciones sistemas alternativos y pasivos para generar el menor gasto posible.
La fachada está basada en una composición bipartita que responde a la zonificación y uso interior, juega con texturas, materiales y colores que estéticamente atrapan la vista tanto del usuario como del transeúnte.
El gran atractivo de la fachada es su celosía de concreto con perforaciones circulares, la cual crea una conexión con el exterior de una forma sutil, reveladora y discreta por momentos, tiene el acierto de jugar con la incidencia del sol, creando sombras en su interior a lo largo del día.
El edificio está diseñado en 4 niveles, 1 departamento por nivel, donde se tiene una clara lectura de la zonificación, una de sus principales cualidades teniendo por separado los espacios públicos de los privados, dando a cada sitio la oportunidad de ser funcional y en su parte social es a su vez flexible para el uso de sus habitantes. Al centro del predio se encuentra un patio alrededor del que se ha creado una grapa que contiene las visuales interiores.