- Área: 3000 m²
- Año: 2018
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Fotografías:ImagenSubliminal
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Proveedores: AutoDesk, Saint-Gobain Ecophon
“Rehabilitar significa trabajar con la historia de lo heredado del pasado y, sencillamente, hacerlo mirar hacia el futuro… Eso requiere mirar hacia atrás con cariño pero sin nostalgia.”
Cuando se nos encargó realizar la rehabilitación del edificio de LH135, en vez de simplemente transformar los espacios, nuestro concepto partió de valorar y mantener los elementos originales y hacerlos mirar hacia el futuro.
Originariamente realizado por un ingeniero, durante nuestra primera visita a LH135 encontramos un antiguo edificio industrial, caracterizado por una estructura regular de hormigón de pilares y vigas, suelos de terrazo, un vestíbulo de granito y una imponente fachada de piedra caliza. Decidimos que todos estos elementos había que recuperarlos y dejarlos a la vista, destacando las características originales del edificio y poniéndolas en valor. Después de decidir qué elementos originales restaurar, el paso siguiente fue animar los diferentes espacios aplicando lo que llamamos "la alegría del color", forjando así una estrecha relación entre la arquitectura antigua y la nueva, el pasado y el futuro...
Inspirados por el color amarillo, que se había utilizado recientemente para marcar las líneas de suelo y paredes del garaje, decidimos que este color invadiría todas las zonas comunes del edificio, dejando a la vista los suelos originales de terrazo, para así volver a ponerlos en valor. De esta forma, el amarillo acompaña a los usuarios desde la puerta principal del edificio, al vestíbulo, pasando por los rellanos ascensores y escalera, hasta llegar a cada una de las oficinas.
Al llegar a las diferentes plantas, nos encontramos con que las oficinas se distinguen entre ellas por el uso de los colores, pero esta vez, únicamente aplicados sobre los techos. Cada oficina es un mundo de diferente color: rosa, blanco, naranja… Sencillamente, pintamos los techos con estos colores para unificar el “cielo” de cada oficina, ya que es la única zona que no puede ser alcanzada por nada, excepto la mirada. De esta forma, además de crear un ambiente único de color, conseguimos resaltar todos los elementos recuperados del edificio, como la textura rugosa de las columnas de hormigón o los diferentes suelos de terrazo existentes.
Pero lo verdaderamente importante de toda esta intervención no es simplemente el resultado, lo importante en LH135 es conocer toda la labor de recuperación y reutilización de todos esos elementos existentes que se han incorporado al proceso de rehabilitación y que han ayudado a contribuir con una actuación sostenible ecológica y económicamente. En definitiva, reaprovechar todo lo que ya tenemos!