- Área: 80 m²
- Año: 2017
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Fotografías:Carolina Estelles
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Proveedores: AutoDesk
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Casa AR surge como necesidad de un sitio de descanso para fines de semana de su propietaria y sus visitas familiares, en un nuevo loteo de baja densidad edilicia junto a la ciudad de Funes, en el área metropolitana de Rosario. Sobre un lote esquinero de 18m x 30m, con los 30m hacia el frente norte la casa se sitúa sobre el fondo consolidando una especie de medianera construida, con una fachada ciega al sur y permeable al norte. Debido al pedido de un programa acotado compuesto por un dormitorio, baño, sala de estar con cocina integrada, galería y un pequeño depósito, pero con la posibilidad de crecimiento a futuro y un presupuesto reducido, se decide optar por un proyecto compacto que optimice al máximo los recursos materiales y económicos.
La casa se configura como una tira rectangular de 4m x 18m con un pequeño quiebre sobre la circulación sur para posibilitar la conexión con el futuro crecimiento, buscando que todos sus ambientes gocen de las mejores condiciones de iluminación y confort. En esta búsqueda de optimización constructiva, tanto ejecutiva como material, se elige el ladrillo como elemento exclusivo para su desarrollo, ya que por sus cualidades formales, estructurales, logísticas, económicas, estéticas y de mantenimiento permite resolver múltiples cuestiones. Un material noble en el tiempo que da respuesta a las situaciones climáticas que enfrenta una casa exenta sin medianeras ni construcciones adosadas en un lote abierto y con poca vegetación.
El perímetro de la casa se resuelve con muros dobles portantes, sus caras interiores y exteriores quedan a la vista ahorrando en revoques, revestimientos y pintura. Cuando aparecen las aberturas el muro interior se interrumpe y el exterior se transforma en un aparejo simple de mampuestos a modo de pantalla, que regula el ingreso de luz natural, la privacidad y la de seguridad de la vivienda, resolviendo a su vez la expresión formal de la misma. Al volcar todos los locales hacia el Norte durante el verano la luz solar no ingresa directamente a la vivienda colaborando con el acondicionamiento térmico de la misma, pero durante el invierno, cuando el sol se encuentra más bajo, la luz penetra en el interior de los ambientes tamizada por esta pantalla de ladrillo generando un juego de luces y sombras que va mutando con el transcurso del día.