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Arquitectos: Lavalle + Peniche Arquitectos
- Área: 2136 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Onnis Luque
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Proveedores: Comex, Helvex, Interceramic, AutoDesk, Autodesk Media and Entertainment, Chaos Group, Procon
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ante la creciente demanda de gente que llega a Mérida buscando una mejor calidad de vida, los promotores inmobiliarios han generado una oferta desmedida de desarrollos que responden únicamente a ejercicios financieros y de mercado.
En un terreno regular en una zona residencial intra-urbana se nos encarga desarrollar un proyecto patrimonial para renta, que genere la mayor cantidad de unidades vendibles posibles.
La orientación y ubicación del predio y la libertad del cliente de “proponerle” la tipología más favorable, nos llevaron a un esquema compositivo en forma de rehilete, el cual ordena 4 bloques habitables que giran según sus necesidades y usos y permiten hacer un proyecto flexible que puede construirse por etapas y que responde a los flujos financieros del inversionista.
La primera etapa o bloque, se pensó para familias pequeñas de tres integrantes y se resuelve en dos niveles que toman la escala urbana y resultan en un esquema lineal y perpendicular a la calle, que marca el acceso al desarrollo, se abre al norte y conduce al usuario al segundo bloque.
El segundo y el tercer bloque, giran en sentido contrario a las manecillas del reloj, buscando las mejores orientaciones y remetiéndose en el contexto para poder tomar mayor altura y respetar la escala de la zona. Estos edificios ofrecen tres tipologías de vivienda enfocadas a parejas recién casadas, adultos solteros o estudiantes universitarios.
El último bloque, gira de nuevo, colocándose de manera paralela a la vialidad, en un volumen de un nivel, que toma la escala del predio inmediato, y que genera un comercio abierto hacía la calle, ofreciendo una plaza arbolada a la ciudad y una azotea común para los usuarios del edificio y la colonia.
Entendiendo siempre el carácter inmobiliario del encargo, realizamos un proyecto formalmente pragmático y local, modulando todo en ejes estructurales de 60 cm, los cuales tratan de no exceder claros mayores a 4.80m de longitud, para poder usar el sistema constructivo tradicional de block, vigueta y bovedilla. Para el acabado final buscamos usar un material sencillo; un aplanado en polvo blanco que evoca el color de la tierra del lugar y que a su vez es de bajo mantenimiento y recibe con dignidad el paso del tiempo.
La expresión formal del proyecto resulta en una secuencia de espacios servidos y servidores, que expresan su voluntad y generan volúmenes cerrados para los servicios y circulaciones; y planos horizontales y abiertos para las zonas habitables.
El resultado final es un desarrollo que cumple con tres premisas: Maximizar el rendimiento del inversionista ofreciéndole un proyecto flexible y gradual, que densifique su terreno para generar la mayor cantidad de metros vendibles. Por otra parte, ofrecemos diversidad, generando diferentes tipologías que se adaptan a las necesidades espaciales y económicas del usuario. Y por último, buscamos integrar el proyecto a la ciudad, a través del comercio y la plaza común, generando un proyecto inclusivo y de bardas hacia afuera que genera diversidad cultural y fomenta la convivencia de barrio.