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Arquitectos: Carlos Valdez, S-AR
- Área: 298 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Ana Cecilia Garza Villarreal
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Proveedores: Llano de la Torre, CREST, BR Bloquera Regiomontana, Cemex, Cordillera/Crest, Cuprum, Hebel
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Casa CV se desplanta sobre un terreno irregular, localizado dentro de un fraccionamiento residencial en las faldas de una imponente montaña carcomida por las pedreras, próximas al poniente de la ciudad de Monterrey.
Dada la complicada condición topográfica, su forma cúbica saca el mayor provecho del predio al recortar las esquinas del terreno triangular, destinando una al acceso a nivel de calle, y la otra a un pequeño jardín un nivel más arriba.
El cubo se compone materialmente de un basamento de concreto, que se encaja sólido en la dura piedra de la montaña, soportando dos niveles de apariencia más ligera, recubiertos por una retícula de block aislante de una cualidad y textura porosa. Esta envoltura se abre por medio de unos cuantos vanos, estratégicamente ubicados para brindar ventilación e iluminación natural al espacio interior, y por una serie de perforaciones rectangulares en la fachada frontal, que crean una especie de juego luminoso al interior durante el día, y al exterior por la noche.
Espacialmente la casa se distribuye en tres niveles y una gran terraza. En el primero se encuentran los espacios de servicio y bodegas, así como la cochera y un estudio de trabajo. El acceso peatonal rompe con la formación cúbica, creando un pequeño pórtico que brinda protección al visitante que aguarda acceso a la casa. Un recibidor interior articula este acceso y uno secundario proveniente de la cochera, y da paso a una escalera que dirige hacia el segundo nivel.
La segunda planta, libre, contiene las áreas sociales: cocina, comedor y sala, ésta última conectada mediante un gran ventanal a un pequeño jardín contiguo, con un único árbol pensado para dar privacidad y sombra a este espacio, y el área suficiente para alargar su uso recreativo al exterior. La escalera hacia el tercer nivel, que continúa hasta la azotea, separa estos espacios del sol implacable del sur, actuando como una zona de amortiguamiento que protege al interior del fuerte calor que se siente la mayor parte del año.
En la tercera planta se encuentran la habitación principal y dos secundarias, delimitadas al frente por un pasillo de circulación interior, paralelo a la escalera, y posteriormente por un patio rectangular que las dota de iluminación natural. A ambos costados de la escalera, que viene del área social y sube a la azotea, se ubican dos terrazas, que permiten ventilar el pasillo de manera cruzada entre sí, y de ser necesario, actuar en conjunto con la terraza de las habitaciones para ventilarlas.
Finalmente, la escalera conduce a la parte superior de la casa, acondicionada como una gran terraza al exterior, extendiendo así el aprovechamiento del espacio limitado por las dimensiones del terreno. Debido a la ubicación elevada de la colonia, por encima del nivel promedio de la ciudad, este espacio goza de vistas privilegiadas del valle y montañas circundantes que conforman la zona metropolitana. Es desde aquí que se vuelve evidente que las condiciones particulares del proyecto son también las condiciones a gran escala de una ciudad que entrelaza su tejido urbano con la majestuosidad de la naturaleza y sus montañas.