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Arquitectos: Husos Architects
- Área: 46 m²
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Fotografías:José Hevia
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Proveedores: Acor, Cortizo
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este es un proyecto de rehabilitación socio y bioclimática de un pequeño piso de 46 metros cuadrados para Jaime, un médico de urgencias y Albóndiga, su Bulldog. Aunque el piso original tenía una doble orientación este y oeste, la mayor parte de la ventilación cruzada estaba bloqueada por varios tabiques con lo cual su distribución no respondía adecuadamente a las altas temperaturas de los veranos madrileños. Este fue un asunto central a tratar en el nuevo diseño tanto para el confort de Jaime como de Albóndiga. Siendo una raza muy delicada, los bulldogs son muy sensibles al calor. Por este motivo se redistribuyó el interior para crear un salón-comedor-cocina que está abierto a este y oeste, facilitando la circulación del aire.
Para la climatización pasiva de la casa además se construyó un huerto vertical en el balcón que da al oeste. La vegetación evita el sobrecalentamiento en verano y en conjunto funciona como colchón térmico, refrescando el interior y evitando el uso de aire acondicionado. Madrid así como el territorio que la circunda, sufre de una importante escasez de agua que se hace cada vez más aguda con el incremento en las temperaturas, con lo cual para el riego de los tomates, hierbas y demás plantas se diseñó un sistema de reaprovechamiento de agua de la ducha con la ayuda de agrónomos y programadores. Hay que tener en cuenta que a lo largo de este siglo, el 80% de España estará en riesgo de desertificación y las grandes ciudades españolas ejercen una enorme presión sobre las fuentes de agua regionales.
En la franja del balcón se genera un micropaisaje conformado por tubos y filtros que van desde la ducha al huerto, haciendo que el flujo de agua y su tratamiento sea visible de manera didáctica. Este micropaisaje es un prototipo de posibles nuevos micro-objetos de deseo para una hipotética nueva era sostenible que podría replicarse en muchas otras viviendas.
Debido a que Jaime tiene cambios de turnos muy diversos, se recupera de las jornadas nocturnas tomando siestas largas durante el día. Por tanto en lugar de centrarnos en el dormitorio como área única para el descanso, se creó una cápsula-periscopio como lugar para la siesta en el salón, que es una alternativa a la cama. Además, sirve para recibir a compañeros íntimos. En el caso de encuentros ocasionales el salón es frecuentemente un lugar central de la vivienda en la cultura sexual gay en Madrid, reservando muchas veces el dormitorio para relaciones de mayor proximidad.
La cápsula de la siesta se convierte también en un espacio para recibir invitados que se quedan a dormir sin que esto suponga desplegar un sofá cama que invada el salón para ser usado. También es un lugar para ver películas al deslizar una compuerta que sirve como pantalla de proyección, o como ventana periscopio que ofrece luz natural y una vista de la calle arbolada, que permite leer de espaldas a la ventana y mirar hacia afuera a través de un juego de espejos.
La cápsula está inscrita en una franja de 1.50 metros de ancho, en la cual hay también un vestidor, un trastero y la cama principal para el descanso nocturno. Albóndiga además de beneficiarse de la climatización natural cuenta con un conjunto de islas de algodón que hemos diseñado para que pueda echarse sobre ellas. Son semiesferas blandas con un efecto refrescante, ya que permiten la circulación de aire entre ellas; están fijadas al suelo por medio de ventosas, lo cual permite que su posición pueda cambiar en cualquier momento.
La vivienda está ubicada en un edificio que es una especie de corrala moderna de los 60´s. En esta tipología se accede a las viviendas a través de un pasillo abierto que facilita la interacción entre vecinos, por ejemplo cuando se encuentran colgando la ropa fuera, una costumbre muy extendida en Madrid como en otros lugares de España. Sin embargo en este caso el patio central está ocupado por un local comercial, lo cual debilita el carácter comunitario típico de este tipo de edificaciones. En las corralas tradicionales el patio es un espacio muy importante que fomenta el intercambio entre vecinos.
En este proyecto hemos indagado en el carácter socializante de las corralas tradicionales de Madrid ya no a través del diseño a escala del edificio, sino a través del diseño interior y del jardín: se prevé que las tomateras, plantas aromáticas y otras especies implantadas en el nuevo huerto doméstico, produzcan algunos excedentes que Jaime no podrá consumir solo. Aparece por tanto la opción de compartir con otros/as ya sean vecinas/os del edificio, compañeros/as de trabajo o seres queridos. De esta manera el huerto aporta alimento y a la vez tiene el potencial de ampliar las capacidades relacionales de la vivienda, cuestionando la idea extendida de entender el apartamento moderno como un núcleo habitacional aislado.
En éste proyecto hemos explorado nuevas posibilidades socio y bioclimáticas en el espacio del hogar alrededor de otras masculinidades post heteronormativas y formas expandidas de comunidad.
