- Área: 230 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Javier Agustin Rojas
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Proveedores: Aluar, Ceramicos La Plata, Hormigonera platense
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Surge de la idea de crear un objeto arquitectónico de carácter escultórico, desafiar la gravedad, suspenderse en el aire. Se materializa con un gran ¨bloque¨ de hormigón visto, con sorprendente presencia para el ojo humano. Vivienda unifamiliar, implantada en una esquina, ubicada en un barrio suburbano de la ciudad de La Plata. Es una vivienda de uso permanente para 2 (dos) personas, pero con hijos y familia que visitan. Para ello se implantaron dos dormitorios extra; y un S.U.M de uso esporádico para recibir visitas.
Se divide en dos plantas, opuestas en su forma y materialidad:
Planta baja, vinculada en su totalidad con el exterior, vidrio hormigón y madera. Se desarrolla en ella la vida social, un garage que se aloja debajo del bloque de hormigón, un ingreso al living, separado por un patio, aparece y se descubre el comedor y la cocina. Estos espacios están comunicados con la planta alta por una escalera totalmente perforada por un vidrio que da ingreso a luz cenital generando una "apertura al cielo", y poder observar sus distintos estados, previo a entrar al volumen de hormigón suspendido de planta alta.
Para terminar con la planta baja, detrás de la cocina y el primer sector social de la casa se esconden dos dormitorios para hijos, amigos y visitas esporádicas, y todo concluye en un S.U.M. con parrilla. Todos estos espacios se vinculan constantemente con el centro del terreno que se encuentra la pileta, "Todo mira hacia el centro" y explota hacia el exterior. Planta alta, en oposición al resto de la vivienda, juega con la caja de hormigón ciego, sin conexión con el exterior, permanece el habitante en silencio y aislado del resto. Sin duda es el volumen que le da personalidad a la vivienda, y genera tener dentro de ella muchas sensaciones, desde perder los limites de la gravedad, los espacios interiores y exteriores se confunden en sus limites, y el silencio absoluto que el material y la composición arquitectónica proporciona.
