- Área: 10382 m²
- Año: 2018
-
Fotografías:Zolezzi Uribe, Yoshihiro Koitani
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Ubicada en una de las zonas con más desarrollo al norte de la ciudad de Querétaro, a 100m de una de las avenidas principales más importantes, se ubica AIRA una torre de 35 departamentos. El proyecto se desplanta en un área angosta y profunda de 2100 m2. Su volumetría compacta responde a la generación de espacio abierto, a la búsqueda de áreas verdes y como respuesta vertical contundente a una zona dominada por arquitectura horizontal.
Con 10,382m2 de construcción, se generan siete prototipos de departamentos distribuidos cuatro por nivel a lo largo de la torre. Los niveles 1, 2, 3, 4, 7 y 8, son plantas tipo; departamentos de una sola planta que van de los 97m2 a los 157m2. En los niveles 5 y 6 se encuentra un departamento especial de dos niveles y 170m2 de construcción. En los niveles 9 y 10 se encuentran dos pent-house por planta, los PHs sur con 260m2 y los PHs norte con 236m2.
Más de 1000 m2 de plaza, terrazas y jardines complementan la vida del proyecto. Las áreas públicas de amenidades ocupan la base y el remate de la torre. La construcción se desplaza al centro del predio ordenando al norte una plaza arbolada para usos públicos y un jardín al sur de carácter más privado. El Lobby da la bienvenida al interior y a éste lo suceden espacios que se complementan para funcionar juntos o independientes.
Por una parte, el salón de eventos se extiende hacia la terraza pergolada, propiciando la vida al exterior y por otra la alberca y la terraza ambas techadas, que se complementan con la zona de asadores y jardines. Despegándose de la colindancia la fachada oeste busca las vistas privilegiadas de una zona residencial arbolada y de un imponente atardecer Queretano. Al norte se enmarcan las vistas lejanas de la sierra que divide los estados de Querétaro y Guanajuato.
Desde afuera se perfora y recorta el monolito, desde adentro se enmarcan las vistas y se vuelve confortable el espacio al invitar al aire y la luz al recorrido de los espacios. Esculpir el sólido para trabajar el vacío. La forma definitiva del edificio surge de tratar la volumetría como si fuese una escultura en piedra.
El concreto pigmentado en tonos arenas era la base para moldear la composición del edificio, los juegos con dobles alturas configuran los remates de la torre. Inspirado en el hecho de que cada persona y cada familia tienen necesidades y gustos únicos es como se genera el ritmo y movimiento de los vanos así, ningún nivel es el mismo, aun siendo plantas tipo. Terrazas o la separación entre las colindancias de los espacios, dramatizan la volumetría, aparecen grietas profundas que se anuncian en las 4 fachadas que invitan al viento y a la luz a recorrer el edificio.
Se buscó siempre la presencia permanente de lo natural, en todos los niveles se vive con esta relación; los tonos verdes los pinta la naturaleza con las jardineras que se distribuyen en las fachadas; los muros de concreto pigmentado aluden al color de la tierra de la zona; son estructura y piel a la vez, el color de los diferentes matices del material genera sutileza en la volumetría y permite que el edificio envejezca de manera más digna con el tiempo. Aira ha sido reconocido con el 2do lugar en la categoría “Residencial” en los Premios Cemex 2018.
