La historia de Chile puede leerse a través de sus pueblos. Mezclando las tradiciones arquitectónicas y constructivas de sus pueblos originarios con la influencia de los inmigrantes europeos, sus pequeñas localidades evidencian la manera en que sus habitantes han ido ocupando y apropiándose del territorio, según sus necesidades, costumbres, y contextos específicos.
Con un paisaje que cambia drásticamente de norte a sur, podemos notar ciertos patrones que se van repitiendo según el clima y la geografía. Desde el uso del adobe y la piedra en las zonas desérticas hasta el metículoso trabajo artesanal con maderas nativas en el sur, pasando por la valiosa arquitectura colonial de los valles centrales, estos 24 ejemplos nos entregan lecciones significativas que todo arquitecto debería observar con detención. Te invitamos a conocerlos, a continuación.
Parinacota
En pleno altiplano andino, específicamente en la comuna de Putre, nos encontramos con un poblado esencialmente ceremonial, de antiguas casas de adobe y piedra que se sitúan junto a una iglesia ubicada en un amplio bofedal, área que solo está ocupada por pastores dispersos sin una unidad urbana. Parinacota presenta una gran importancia etno-cultural para Chile, puesto que es aquí donde se localiza uno de los tres dialectos aimaras de la Cordillera de los Andes. El pueblo se declaró Monumento Nacional en 1979, al igual que su tradicional iglesia.
Isluga
Ubicado en las altas tierras de la comuna de Colchane, en la Región de Tarapacá, este pueblo destaca por su composición de traza vernácula con casas de barro. Es un pequeño caserío despoblado que fue centro ceremonial Aymara, y que en la actualidad tiene un único habitante: el custodio de su iglesia, edificación que data del siglo XVII. Además, presenta en sus alrededores parte importante de la historia patrimonial de Chile y América, incluyendo los sitios arqueológicos de Pukara de Isluga, el cementerio Aymara Usamaya, las ciudades funerarias y habitacionales de Chok y Qolloy, y las Chullpas de Sitani, que pertenecieron al imperio inca. Isluga fue declarada Zona Típica y Patrimonial el año 1992.
Humberstone
El pueblo de Humberstone, hoy abandonado, es un vestigio de la época de gloria de la extracción del salitre en el norte de Chile, sobrepasando los 3.500 habitantes durante su apogeo. Declarado Monumento Nacional y Patrimonio Cultural de la Humanidad, Humberstone se caracteriza por una arquitectura en madera de pino de estilo clásico inglés, destacando como hitos urbanos su teatro, su iglesia, y su pulpería. Se encuentra a 47 kilómetros al este de la ciudad de Iquique, Región de Tarapacá.
Ayquina
Declarada Zona Típica en 1974, Ayquina se emplaza a 3.000 msnm, en una quebrada que desemboca en el Río Salado, afluente del Río Loa. El pueblo, de origen precolombino, presenta un trazado con un eje central, sobre el cual se sitúa un espacio que reúne la plaza e iglesia, ubicado en una depresión. Las casas, hechas a base de piedra caliza con techos de paja, se distribuyen en forma escalonada dejando estrechas calles y pasajes, ocupando distintos niveles de la topografía de la quebrada. Cada 8 de septiembre se celebra la fiesta religiosa de la Virgen de Guadalupe y que congrega a más de 70.000 personas de todo el país.
San Pedro de Atacama
Declarada Zona Típica en 1980, San Pedro de Atacama se emplaza en un oasis ubicado en la cuenca de Atacama y que se caracteriza por sus sitios arqueológicos como la aldea de Tulor, un asentamiento precolombino de casas circulares aglutinadas, construidas con adobones de barro, cuyo techo cónico se sostenía con postes. Su legado arquitectónico más reciente está simbolizado en la Iglesia de San Pedro, construida en piedra y adobe. Mientras su riqueza geográfica se refleja en el Valle de la Luna, el Géiser del Tatio, la laguna Chaxa y el valle Arcoiris.
La Tirana
A 75 kilómetros de Iquique, la fiesta de La Tirana que se celebra anualmente en la Región de Tarapacá es una de las más importantes de la zona norte del país. De orígenes coloniales, la festividad en honor de la Virgen que se encuentra en la localidad del mismo nombre posee fuertes influencias andinas, presentando cofradías de danza semejantes a las del vecino altiplano boliviano, como Diabladas o Morenadas.
Chiu Chiu
San Francisco de Chiu Chiu, más conocido como Chiu Chiu, se sitúa a 30 km al este de Calama, en la Región de Antofagasta. Concentró en sus orígenes a una gran población indígena atacameña y formó parte del camino del inca. Fue conquistada y evangelizada por españoles, quienes fundaron el actual pueblo que hoy cuenta con alrededor de 500 habitantes. Esta localidad andina–colonial se declaró Zona Típica el año 2004, y se caracteriza por su arquitectura de pequeñas construcciones de adobe y por albergar un Monumento Nacional: la Iglesia de San Francisco, de estructura de adobe y techo de madera de cactus, la edificación religiosa más antigua que se conserva en Chile.
Pisco Elqui
Asociado a la producción del pisco chileno, Pisco Elqui se ubica en la Región de Coquimbo, a 570 km de Santiago. Este pueblo precordillerano se ubica a 1300 msnm, y debido a su historia, se configura urbana y arquitectónicamente en base a antiguos fundos y destilerías dedicados a la producción de pisco y algunos tipos de vino. Cuna de la poeta Gabriela Mistral, en Pisco Elqui puedes visitar la Iglesia Nuestra Señora del Rosario (1922), de estilo neogótico, construida en mamposteria y madera.
Andacollo
A 54 kilómetros de Coquimbo (IV Región), el pueblo de Andacollo está asociado a la minería a través al personaje del pirquinero, un minero que realiza las labores de extracción de mineral en forma artesanal. Asimismo, el pueblo celebra la fiesta religiosa más importante del Norte Chico y una de las más antiguas del país: la fiesta de la Virgen del Rosario, realizada cada año entre el 23 y el 27 de diciembre.
Pomaire
Ubicado a 50 kilómetros de Santiago, Pomaire es un pueblo caracteriza a nivel nacional por la producción y venta de artesanía en greda rojiza y restaurantes de cocina típica chilena —asociada al valle central— como el pastel de choclo, la empanada, la cazuela y el costillar al horno.
San Jose de Maipo
Esta localidad –ubicada a 48 km de Santiago– fue fundada en 1792 con la finalidad de mantener el control administrativo del territorio, además de facilitar las faenas de extracción de plata en la zona. Por este motivo, se configura en base a un trazado en damero, incluyendo en sus manzanas distintas tipologías con base en la arquitectura colonial, apareciendo así fachadas continuas, balcones corridos, ornamentos neoclásicos, entre otros elementos. Destacamos su Iglesia y Casa Parroquial de adobe, Monumento Histórico que data del año 1800.
Sewell
Ubicado en plena Cordillera de Los Andes, a 150 km de Santiago y sobre los 2140 msnm, este antiguo campamento minero se configura en torno a una gran escalera central, que llevaba a sus habitantes a sus viviendas y otros edificios públicos. Su arquitectura en madera y acero es todavía visible a través de sus edificios multicolores, incluyendo un hospital, una Iglesia, una compañía de bomberos, clubes sociales, un cine, e incluso una piscina temperada. Actualmente sin habitantes permanentes, Sewell fue declarado Patrimonio de la Humanidad en el año 2006.
Población
Población pertenece a la comuna de Peralillo, Provincia de Colchagua, en la VI Región. El poblamiento de esta localidad comenzó de la misma manera en que ocurrió en el resto de la zona, en las inmediaciones de los caminos donde se ubicaron las grandes casas patronales; ocupación marcada por la construcción de la línea férrea que se extendería hasta Pichilemu y que contemplaba una estación en el lugar. Hoy es posible observar un pueblo, que fue declarado Zona de Conservación Histórica, con largas casas de adobe, donde la vida pasa tranquila bajo sus corredores continuos y techos de teja, construcciones que se encuentran en buenas condiciones gracias a las intervenciones de reconstrucción y mantenimiento después de los fuertes sismos que han debido soportar.
Lolol
Su origen se remonta al período en que los picunches habitaban el área, dando paso en la época colonial a una de las haciendas más importantes del siglo XIX y gran parte del siglo XX: la Hacienda de Lolol. Siguiendo las lógicas de las faenas agrícolas de la colonia, se desarrolló una arquitectura típica de la zona central campesina, a través de casas de adobe, techos de teja y corredores continuos que se despliegan en torno a una calle principal. En el año 2003, Lolol fue declarado Monumento Nacional en categoría de Zona Típica y Pintoresca de Chile, debido a la conservación de sus características constructivas, su cultura y sus tradiciones, las que le otorgan hoy la denominación de "tierra huasa".
Chanco
Declarada Zona Típica en 2000, el pueblo de Chanco emplazado sobre un antiguo asentamiento de indígenas pescadores fue fundado en 1849. Originalmente estaba a orillas del mar. Sin embargo, durante el siglo XIX las dunas avanzaron sepultando los cultivos y el pueblo viejo. Fue recién a principios del siglo XX, gracias a la acción del botánico alemán Federico Albert Faupp, que se plantó un bosque que fue declarado reserva nacional en 1979 y que permitió refundar el pueblo al este de este bosque.
Pueblo de Vichuquén
Vichuquén es un pueblo fundado durante la época colonial chilena, caracterizado por una arquitectura de adobe, fachadas continuas, corredores, y tejas de arcilla cocida. Con más de 400 años de historia, sus viviendas y edificios parecen esconder –detrás de sus muros de entre 60 y 120 cm de espesor– una serie de misterios y mitos populares, ganándose así el nombre de "Pueblo de Las Brujas". Se encuentra en la Región del Maule, a 290 km al sur de Santiago.
Villa García (Cunco)
Declarada Zona Típica en 2016, este conjunto urbano está emplazado en el sector rural de Cunco. Está compuesto por 24 casas, una capilla, una escuela con internado, una posta, una sede social y un galpón, y fue diseñado y construido entre 1965 y 1969 por el religioso capuchino Bernabé Gutknecht en conjunto con la comunidad local. Villa García es el único conjunto que se reconoce actualmente en la región planificado con la intención de formar una comunidad agrícola autónoma, asemejándose a la concepción urbana laboral del socialismo utópico de principios del siglo XIX.
Capitán Pastene
Fundada a inicios de 1900 por un grupo de 700 inmigrantes italianos en la Región de la Araucanía, a 630 km al sur de Santiago, Capitán Pastene presenta una atractiva tradición culinaria con raíces en Italia, que se ha transformado en el principal atractivo para los turistas que la visitan. El pueblo incluye algunas construcciones patrimoniales como la Iglesia de San Felipe de Neri (1943), el Cinema Pastene –el más antiguo de Chile, construido hace más de 100 años–, el Museo del Prosciutto, y el Molino Rosatti (1916).
Caleta Tortel
Si te encuentras recorriendo los últimos tramos de la Carretera Austral, ahí donde el territorio chileno se fragmenta en una enorme cantidad de islas, recomendamos desviarse algunos kilómetros hacia la costa –Ruta X-904– para estacionar tu automóvil e internarte como peatón a la increíble red de pasarelas de madera de Caleta Tortel. Con un poco más de 500 habitantes, el pueblo se levanta a través de pilotes por sobre el agua turquesa y de textura lechosa, generando una situación urbana única en la que los espacios públicos y privados son ambiguos, y el roce con sus habitantes es profundo e inevitable.
Puyuhuapi
La Región de Aysén nos regala un pequeño pueblo que nace de la mezcla entre inmigrantes alemanes y chilenos provenientes de la Isla Grande de Chiloé. Su arquitectura y forma de vida da muestra de esta relación; sus viviendas y edificios de madera nativa presentan un marcado estilo alemán, y sus principales actividades se centran en la pesca y en la artesanía de alfombras, tradición heredada de Walter Hopperdietze, ingeniero textil alemán y uno de los fundadores del poblado.
Puerto Octay
A 68 kilómetros de Osorno, Puerto Octay nace en el proceso de la colonización alemana impulsada por el Estado chileno en el sur del país. Las características geográficas del lugar, con la península de Centinela resguardando la ribera del Lago Llanquihue de los vientos propios de la zona, hicieron de esta ciudad, un punto estratégico para las embarcaciones fluviales de fines del siglo XIX. El lugar se convirtió en uno de los principales puertos de la Cuenca del Lago y con ello, creció con talleres, industrias, casas, comercio y vapores que recalaban en el muelle.
Dalcahue
En la isla Grande de Chiloé, mirando hacia el continente, se ubica este pequeño pueblo junto al canal homónimo. Se puede observar construcciones de pequeña escala típicas de la zona, realizadas en madera y cubiertas por sus características tejuelas. Destacan dentro de esta localidad la Iglesia de Dalcahue, una de las 16 iglesias de madera del Archipiélago de Chiloé que fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y las cocinerías diseñas por el arquitecto chileno y Premio Nacional de Arquitectura el año 2016, Edward Rojas, que otorgan al lugar la mezcla perfecta entre la arquitectura contemporánea y las tradiciones chilotas.
Villa Las Estrellas
Como nota especial destacamos a Villa Las Estrellas, núcleo poblacional civil que Chile posee en la Base Presidente Eduardo Frei Montalva, en la Antártica Chilena. La localidad se ubica en la península Fildes de la isla Rey Jorge, en el archipiélago de las Shetland del Sur, a 950 km al sudeste de Puerto Williams, ciudad de la cual depende administrativamente. Sorteando un clima extremo en medio de un paisaje único, es uno de los únicos asentamientos en la Antártica en donde existe personal temporal cumpliendo funciones militares, científicas o de servicio, acompañados de sus familias.