A pesar de ser un referente urbanístico reconocido a nivel internacional, el Eixample de Barcelona se enfrenta a múltiples desafíos propios de una ciudad en constante cambio, una urbe muy diferente a la proyectada por Ildefons Cerdá.
En ese escenario, la oficina barcelonesa Leku Studio ha desarrollado un proyecto de “amabilización” de varios entornos escolares en el Eixample, testeando mediante urbanización reversible, nuevos usos y distribuciones que favorecen espacios más humanos y amables y que acerca la escala urbana a los niños. "Deben ser espacios comunitarios; como territorio de extensión de la escuela; como espacio para el juego, para el verde, la historia y la vida local de los barrios", explican Leku Jokin Santiago Elorriaga y Marta Sola Páramo, cofundadores de Leku Studio.
Memoria oficial: El Eixample de Barcelona es un ámbito de la ciudad que pese a ser un referente urbanístico reconocido a nivel internacional, actualmente se enfrenta a grandes retos: movilidad sostenible, mejora ambiental, espacios públicos saludables y naturalización. Se trata de una trama altamente densificada, donde el espacio destinado al vehículo predomina sobre el peatón.
La ciudad trabaja por revertir esta realidad definiendo un modelo que priorice a las personas potenciando una movilidad sostenible y construyendo un espacio público saludable, diverso, a velocidad humana —con especial atención hacia las niñas y niños y la tercera edad— en una ciudad donde las condiciones topográficas facilitan una cómoda movilidad caminando o en bicicleta.
En este sentido, los entornos de las escuelas reclaman ser redefinidos como espacios amables; como lugares habitables; como espacios comunitarios; como territorio de extensión de la escuela; como espacio para el juego, para el verde, la historia y la vida local de los barrios.
Urbanización adaptativa: Ante este enorme reto de cambio de paradigma urbano, el diseño del proceso de transformación en sí mismo es esencial. La gestión y programación del “mientras-tanto” flexibiliza el proceso de planificación ofreciendo herramientas adaptables capaces de involucrar agentes diversos y dar una respuesta ágil y directa a los problemas locales e inmediatos de los vecinos.
Testear, medir y definir: La intervención táctica o flexible es una herramienta de planificación que permite testear sobre el terreno las ideas y propuestas que acabarán formalizando el proyecto definitivo. La intervención del “mientras-tanto”, permite adaptar y ajustar las propuestas para finalmente definir un proyecto de consenso que responda a las necesidades caso a caso.
Las escuelas del Eixample han sido actores clave del proceso a través de su participación en la definición de la urbanización temporal que ahora deberá ser experimentada en primera persona y monitorizada. Una fase trascendental que implica la observación, el análisis y la medición objetiva y sensitiva, mediante la comparación de parámetros consensuados. Una relación de datos que permitirá evaluar los aciertos y errores y que ayude a definir el nuevo modelo urbano del Eixample.
