'He aquí mi secreto, que no puede ser más simple: sólo con el corazón se puede ver bien; lo esencial es invisible a los ojos'. Antoine de Saint-Exupéry nos recibe en la exposición 'Da Árbore á Cadeira', una exposición del Museo Centro Gaiás (Ciudad de la Cultura de Galicia), que desde el día 7 de Abril nos muestra una selección de sillas de arquitectos gallegos o afincados en Galicia. La muestra parte del tronco, el elemento primigenio del que nacen las sillas, y continúa su recorrido a través de una pequeña selección de arte gallego relacionado con el paisaje gallego. La muestra es imprescindible para todo aquel que tenga la suerte de visitar Santiago de Compostela antes del 5 de Noviembre, fecha en la que finalizará la exposición.
¿Qué tienen las sillas para atraer tanto a los arquitectos? Como elemento arquitectónico su incorporación a un espacio le da vida y ambiente, como elemento plástico otorga carácter y personalidad. Pensemos en los grandes maestros de la arquitectura: todos tienen una silla en su portfolio de obras. Mies Van der Rohe, Le Corbusier, Wright, Marcel Breuer, Charles & Ray Eames, Rietveld, Alvar Aalto, Jacobsen, Saarinen... La lista es inacabable, y la calidad y trascendencia de cada una de ellas es incustionable. En cierto modo podríamos decir que parte de la historia de la arquitectura se puede explicar a partir de las sillas de los arquitectos. ¿No son acaso un manifiesto radical y brutal de los conceptos teóricos que cada arquitecto desarrolla?
Además de la silla como manifiesto arquitectónico, vamos a meter en la ecuación las particularidades de Galicia y del bosque gallego. Si tenemos que definir Galicia para alguien que no la conozca nos bastaría con una palabra: verde. Galicia es un territorio muy verde, con una gran cantidad de bosques y una población que en gran medida vive de esos bosques. Los que tenemos la suerte de vivir aquí no lo valoramos, pero con sólo girar la cabeza podemos ver un bosque o el mar. Parece claro que sólo podía haber una conclusión lógica: los arquitectos de Galicia tenían que hacer sillas... Y vaya sillas.
Con esto en mente Carlos Seoane, arquitecto, profesor de Construcción en la ETSA de A Coruña, antiguo colaborador de arquitectos como David Chipperfield, Rafael Viñoly o Álvaro Siza, decide sacar a la luz estas sillas y darles el protagonismo que se merecen.
Con la colaboración de María Montenegro, Raquel Ferreiro y Marta Fernández en el montaje de la exposición, el equipo de comisarios formado por Alfonso Bar, Soledad Bugallo y Óscar Fuertes, capitaneados por Carlos Seoane inició una labor de investigación y puesta en valor de sillas clásicas como las de Xosé Bar Boo o Alejandro de la Sota, encontrando rápidamente grandes ejemplos de arquitectos con una trayectoria considerable a sus espaldas, y arquitectos jóvenes con ideas casi revolucionarias. El resultado es una exposición muy completa y trabajada, con muchísima documentación asociada a ella, con un gran trabajo de puesta en valor del diseño, pero también de la fabricación. Tan importante es el arquitecto como el carpintero que hace la silla, tan importante es la silla del maestro como la del discípulo.
Las sillas
De las más de 40 sillas y objetos que podremos encontrar en la exposición, hemos querido seleccionar cinco por lo curioso de sus formas, lo llamativo de sus procesos constructivos, o lo representativo de una época o forma de pensar de las mismas. Porque al pensar en Galicia pensamos en tradición, y eso no siempre se cumple. En las siguientes imágenes veremos cinco sillas muy distintas, todas ellas comentadas por sus autores, que representan cinco formas de pensar y de enfrentarse a la arquitectura. Para las otras 35 es imprescindible acercarse a la Ciudad de la Cultura y perderse en la muestra. No lo dudéis.
CREUSeCARRASCO
La silla dibujada en el plano del tablero de madera se recorta con los entrantes precisos para dar paso al volumen. Se concibió por su economía, y de caras blancas que marca su silueta contra los cantos.
FLU-OR
M es un mueble de apoyo para el salón. Tiene la capacidad de desplegarse dos veces, ampliando la superficie de apoyo. Ha sido diseñado específicamente para estar al lado de un sofá. Es una superficie auxiliar si está recogido, pero si se despliega se convierte en un asiento largo, que puede complementar el sofá.
Sabín-Blanco Architects
Pretendíamos un elemento versátil que acompañase en el tiempo y se adaptase a las actividades de los niños. Un objeto manejable y ligero al tiempo que robusto y seguro, que ellos pudiesen trasladar, girar o invertir en sus juegos diarios sin riesgo de vuelco. Un objeto de asiento en varias alturas, un lugar de apoyo, un peldaño, un soporte, un espacio para esconder, un vacío que llenar, oportunidades y aventuras de juego que ofrecer...
Cenlitrosmetrocadrado
Minia nace con la intención de proponer una pieza de asiento utilizando procesos productivos de baja tecnología que nos permitan su fabricación en pequeñas carpinterías. La estructura se construye a partir de pieza de madera de espesor constante que se van orientando en la dirección de los esfuerzos. Esta forma de concebir la estructura nos permite reducir el material utilizado contribuyendo a una reducción del peso en su conjunto.
Elías Cueto
Margarita es un híbrido entre el galán de noche y el banco-maletero, una pieza de mobiliario típica de las habitaciones de hotel. El diseño se plantea como una simple estructura de barras resuelta mediante gestos mínimos: las barras se especializan en función de su posición y uso y las uniones protegen las cabezas de las barras cosiendo las piezas mediante pasadores vistos, única decoración de la pieza.
Título
"Da Árbore á Cadeira", La silla como manifiesto arquitectónico en GaliciaTipo
ExhibiciónSitio Web
Organizadores
Carlos Seoane, Museo Centro Gaiás, Alfonso Bar, Soledad Bugallo, Óscar FuertesDesde
07 de Abril de 2017 12:00 AMHasta
05 de Noviembre de 2017 12:00 AMDirección