-
Arquitectos: Estudio BaBO
- Área: 330 m²
- Año: 2015
-
Fotografías:Daniela Mac Adden
-
Proveedores: Agüero, Cetol, FV, Maderera Newton
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El encargo plantea el proyecto y construcción de una vivienda unifamiliar aislada en un lote de 1330 m2 ubicado en un barrio residencial de baja densidad de Olivos, partido de Vicente López, Buenos Aires. Los comitentes son una pareja de jóvenes profesionales y sus dos hijos de corta edad.
Es determinante, también, la presencia de familiares con movilidad reducida que podrían llegar a hacer un uso intensivo de la vivienda.
El contexto está dominado por lotes de dimensiones importantes ocupados por viviendas unifamiliares aisladas, de una o dos plantas, de morfología y estilo variado.
El lado opuesto de la calle que da acceso al lote presenta una mayor consolidación (algunas viviendas datan de finales de los años 50), mientras que los lotes del lado que nos ocupa son más recientes. La profusión del verde es generosa, pero asoma sobre todo desde del interior de los lotes; no encontramos arbolado de alineación proyectado, si bien hay algunos árboles añejos de dimensiones importantes. La parcela presenta una geometría particular: la calle de acceso traza una curva forzando a que el linde de frente presente un arco de circunferencia muy cerrado. Esta traza condiciona la inserción y el acceso desde la calle.
Las dimensiones del lote, su particular geometría, y la necesidad de garantizar la accesibilidad a todos los ámbitos de la vivienda llevaron a tomar la decisión de articular todo el programa en una sola planta.
La extensión de éste (330 m2) y su disposición en cruz asimétrica permitió ocupar la superficie necesaria para poder definir cuatro ámbitos exteriores (cuatro jardines) diferenciados y vinculados a los diferentes espacios interiores.
Un jardín de acceso, pavimentado, más duro y público, nos recibe y da acceso, por un lado al área de servicio, y por otro al distribuidor principal de la vivienda, en el punto de articulación de las dos “L” que conforman la cruz y que contienen el programa.
A un lado el área de día: un ala con el comedor, el estar y un escritorio, y otra con la cocina y todas las dependencias de servicio asociadas.
Al otro lado, el área de descanso con el dormitorio en suite ocupando una de las alas, y el resto de dormitorios y su baño ocupando el ala perpendicular a ésta.
Como cierre de esta última, un ámbito de play-room se abre a una galería semicubierta vinculada también a un espacio de quincho, con parrilla, comedor y sala de máquinas. Esta galería vincula además, dos de los cuatro espacios exteriores antes mencionados: el jardín principal dónde se ubica la pileta, abierto, franco, como fondo del estar-comedor, y un jardín más acotado e íntimo relacionado con las habitaciones. El cuarto espacio exterior es tratado como jardín productivo y se asocia a la cocina y al comedor-estar.
Las cuatro alas se resuelven estructuralmente mediante dos crujías longitudinales, de 1,90 y 4,00 m (que alojan espacios servidos y servidores respectivamente) conformadas por columnas dobles de madera en sus lados exteriores, dispuestas cada 1,90, y muros portantes en su lado interior compartido. Estas crujías dobles tienen también diferentes alturas, permitiendo así la entrada de luz alta y desde el lado opuesto al que se abre la fachada principal de cada uno de los espacios.
Este juego de planos articula la volumetría general dando continuidad a todo el desarrollo y permite complementar y asegurar la correcta iluminación en todos los espacios de la casa. Las vigas de madera tienen todas la misma sección, conformando cantos mayores cuando es necesario mediante la superposición de varias de ellas.
Esta lógica tectónica de la estructura se extrapola a la cubierta, resolviéndose toda ella en madera.
En cuanto al resto de la materialidad se partió de una concepción estratificada de la volumetría. Un zócalo de hormigón armado visto, con los 70 cm de altura necesarios para generar un antepecho compatible con el uso de mobiliario asociado a algunas fachadas, establece la relación de la casa con la cota cero. Posteriormente, un desarrollo de ladrillo visto pintado de blanco o carpintería según caso completa la fachada. Finalmente, y cómo último estrato, la línea de la cubierta y todo su desarrollo, en madera, cómo terminación y coronamiento.
Es importante la recuperación de la persiana-barrio de madera y su utilización como protección solar pero también como tamiz visual en todas las aberturas de la casa.