- Área: 1356 m²
- Año: 2014
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Fotografías:André J Fanthome
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Proveedores: Saint-Gobain, Ardex
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Las grandes residencias urbanas son registros, así como articulaciones, del valor filial, financiero y de aspiración. Suministrando tanto a las necesidades de sus habitantes como a sus caprichos, son, a la vez, espacios de indulgencia privada como objetos de una expresión estética socialmente motivada.
No es de extrañar entonces que lo lujoso y lo exótico se buscan en varias formas de su diseño. Mientras se desarrollan los procesos de oferta y demanda globalizadas, construcción de impacto, fabricación y logística de adquisiciones, un mayor valor parece ser extraído de lo extrínseco o exótico en términos de materialidad y mecanizado en términos de forma y tecnología. Los sistemas de producción arquitectónica también parecen haber separado las relaciones entre la fabricación y el material, mientras que la forma parece depender en gran medida de las geometrías que facilitan la aplicación de los rendimientos de la superficie producida industrialmente y pre-diseñada. Irónicamente, la búsqueda de lo inusual en la arquitectura urbana contemporánea parece un paseo en un "jardín amurallado" de estética ubicua.
CASA OUTRÉ intenta un redescubrimiento de lo singular y distintivo, específicamente, en el trabajo de materiales humildes; en el sitio y hecho a mano. Se intenta hacerlo mediante un retorno al vínculo entre el hacer y el material. Desde el encofrado de hormigón a medida, al suelo vertido, hasta la carpintería curvada y la mampostería rítmicamente entallada, el diseño libera su construcción hecha a mano de los grilletes de la línea recta, dándole un impulso. De este modo, permite que los detalles hechos a mano se superpongan entre sí y se reproduzcan en todo el diseño, en lugar de limitarse a los puntos de intersección material.
Inducido por la grilla de la ciudad y sus controles volumétricos, la forma residencial urbana más comúnmente, y quizás de manera más simplista, se resuelve en la rectilinearidad. Esta resolución en forma de caja del programa, inevitablemente da como resultado una compartimentación espacial, además de que los imperativos inmobiliarios estimulan las burdas pilas de apartamentos en placas cortadas con un molde. La curvilineidad del edificio crea formaciones espaciales más fluidas y ayuda a crear espacios de transición sin problemas para la convivencia social entre los miembros de la familia residente.
CASA OUTRÉ también reaviva la relación entre lo hecho y lo natural. La urdimbre de la mano y la trama de lo verde aún más aleja a este diseño de lo industrial. El entrelazamiento de las vigas de madera y de los plantadores verticalmente instalados permite que el vegetal se enrede con el estructural, mezclándose con los jardines internos y el tejado. Este acoplamiento del arte y del follaje también subraya la lámpara floral diseñada por el diseñador Mann Singh para el salón.
