- Área: 180 m²
- Año: 2014
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Fotografías:do mal o menos
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Una pequeña parcela, de unos 100 metros cuadrados, situado en una calle estrecha, sin rasgos y diversificado, en el centro de Oporto. La última de las tres casas, una avenida de acceso, que era necesario mantener y acompañada de una pared ciega de color rojo. Un programa tradicional para una familia con un niño.
La construcción existente se abandonó, sin valor arquitectónico especial, dando paso a la decisión de una demolición completa. Así, el proyecto se inició con la búsqueda del equilibrio entre la resolución de un programa aceptable, dada la limitada área disponible, y la difícil integración con la construcción circundante, lo que dio lugar a una solución más abstracta y atemporal: un expuesta casa de concretos en obra.
Respetando el área de ocupación permitido y alineaciones impuestas, el edificio ocupa la parte frontal de la trama, la creación de dos momentos: uno positivo, la casa, y otro negativo, el patio adyacente a la parte posterior de la parcela.
La entrada, situada en el extremo más septentrional, en el fondo, al lado del callejón, el suelo retirado en el nivel superior, las aberturas longitudinales en vidrio oscuro, que intentan articular las diferentes alturas de los edificios adyacentes, contribuyen a la desmaterialización de la casa. El hormigón a la vista y el vidrio fueron elegidos por su capacidad de cambiar con los años y su gran durabilidad. Cuando se tratan adecuadamente pueden dar a la casa una especie de carácter atemporal.
En contraste con el aspecto externo robusto, surge el interior luminoso y cálido, con paredes blancas y muebles de madera y suelos de madera clara. La escalera, un elemento central, conecta todas las plantas, desde el sótano donde se encuentran la lavandería y áreas técnicas, a la planta superior de más atrás, un espacio versátil abierto a una terraza parcialmente cubierta.
La vivienda está bastante cerrada buscando privacidad en relación con su entorno y sólo se abre en la planta baja a través de una amplia acristalamiento hacia el patio, la creación de espacios de transición desde el exterior al interior, un rincón tranquilo, verde en el centro de la ciudad.