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Fotografías:Cathy Cunliffe, Costas Tsagarakis, Yiannis Alefantou
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Kinsterna Hotel & Spa trata la experiencia de alojarse en un hotel como un sendero de descubrimiento. Kinsterna es una mansión restaurada construida alrededor de una cisterna en medio de un exuberante campo de olivos y cítricos cerca de la fortaleza bizantina de Monemvasia. Originalmente construido en el siglo XVIII, algunas partes del edificio datan del siglo XIII. Estas capas de historia fueron parte integral del proyecto de restauración. El diseño anima a los visitantes a buscar su propia interpretación del pasado del edificio, como un viaje a través del tiempo. Memoria, naturaleza y materialidad se tejen juntos, poniendo de relieve un único elemento arquitectónico que puede ser expuesto en varios niveles diferentes.
En este caso, el agua es el tema central que recorre el diseño. Durante siglos, el agua ha dado vida a estas tierras fértiles, desde su origen en las montañas, su descenso por un arroyo y al riego de los campos, antes de que se canalize en la antigua cisterna. Siguiendo este camino, Divercity extendió el flujo natural del agua, que se acumula debajo de una plataforma de comedor en voladizo, luego serpentea a través de los espacios interiores y exteriores para desembocar suavemente en la piscina, que se asemeja a un río. El agua abre vistas a los espectaculares alrededores: el imponente Monte Taygetus por un lado, el fortificado y medieval Monemvassia, por el otro.
En las suites y habitaciones, el ambiente del edificio original ha sido cuidadosamente recreado usando métodos tradicionales de construcción y materiales locales auténticos. La fascinante estratificación de varias fases de construcción se representa en el trabajo de piedras yuxtapuestas y el grueso revestimiento de yeso. Los cielos muestran ya sea bóvedas de piedra expuestas, vigas de ciprés o carpintería tradicional. Los patrones en las paredes interiores aluden a la tradicional fabricación de encajes o demuestran bóvedas llenas y chimeneas. El Spa se convierte en una experiencia cinematográfica, donde los huéspedes son guiados desde la oscuridad mística de la zona de recepción y vestuarios, hacia la luz del sol que generosamente llena el área principal.
Una extensión del hotel está prevista para dar cabida a zonas comunes adicionales. Esta adición será una excitante combinación entre la mansión histórica y la arquitectura contemporánea. El plan es trabajar sobre los patrones abstractos que se encuentran en muchos de los edificios antiguos en Monemvassia, tales como techos de tejas doblados y aberturas estrechas, que crean efectos de iluminación evocadores.
