Museo Bailo en Treviso / studiomas architetti + Heinz Tesar

Curado por ArchDaily

Arquitectos: Heinz Tesar, studiomas architetti; Heinz Tesar, studiomas architetti
Área: 1780 m²
Año: 2015
Fotografías:Marco Zanta
Proveedores: BANDALUX

Studiomas architetti y Heinz Tesar ganaron un concurso para renovar el museo en 2010. Se agregaron dos elementos al edificio del monasterio del siglo 16: una fachada cruciforme, que marca la nueva entrada y un pasillo cubierto, la "galería", que forma también la nueva entrada.

El Museo Bailo alberga una colección de arte del siglo 20, pero fue cerrado hace 15 años ya que como antiguo edificio del monasterio se encontraba en una urgente necesidad de renovación. El museo necesitaba una nueva fachada, más adecuada a su papel institucional y a su posición en el centro de la antigua ciudad; la fachada existente, reconstruida en 1952, carecía totalmente de esta calidad. Así el proyecto añade una nueva vista frontal al ala sur del edificio histórico, que fue dañada por bombas durante la Segunda Guerra Mundial y reconstruida en 1952.

La forma en de cruz es una composición de ocho losas prefabricadas de piedra artificial, salpicadas de pequeñas perforaciones, que están hechas de una mezcla de mármol de Carrara y cemento blanco especial. Ésta destaca frente a muros preexistentes, recubierta de un yeso blanco pulido llamado marmorino. Detrás de la fachada una extensión hecha de hormigón blanco fue encajada en un estrecho patio interior. Formando una nueva entrada y tienda de libros, que también se utiliza como sala de exposiciones y sala de conferencias. Esta nueva "galería" es un cuerpo de hormigón liso, de unos 28 metros de longitud, 3 metros de ancho, 12 metros de altura, estableciendo sobre cuatro pilares delgados.

Una claraboya corre a lo largo de la extensión de 28 metros de largo, ayudando a traer la luz natural al edificio. Tres ventanas - una en el eje de la cruz, otra a la derecha de la puerta y una tercera en el flanco de la extensión - miran a una pequeña plaza en frente del edificio. Una de estas ventanas ofrece una vista al claustro sur, donde se muestra una escultura de la figura bíblica de Adán y Eva. La obra fue diseñada por Arturo Martini (1989/47), un artista nacido en Treviso cuyas pinturas, esculturas y gráficos se incluyen en la colección del museo.

Las paredes de la galería están cubiertas de estuco de color arena y los suelos son de terrazo, mármol de Carrara y cemento blanco - una referencia a las terminaciones utilizadas en las paredes exteriores del edificio. Los tabiques fueron retirados de las habitaciones en la parte antigua del edificio para revelar el diseño original, que ahora cuenta con una serie de anchas galerías abovedadas.

Una restauración conservadora de los elementos decorativos originales, materiales y estructuras de todo el edificio se ha logrado en el claustro, en las salas abovedadas, así como en las pinturas decorativas de la pared. Las esculturas se muestran en una serie de zócalos grises y en vitrinas diseñadas por los arquitectos. Todas las bases, las vitrinas, las mesas y los muebles han sido re-diseñados como una familia de pequeñas arquitecturas que sirven a las obras de arte, alojadas en las antiguas salas del museo. El museo reabrió al público a finales del mes de octubre de 2015.