La construcción del nuevo Estadio Olímpico de Tokio, cuyo diseño había sido adjudicado a Zaha Hadid tras concurso público, finalmente sale de la incertidumbre. Tras su reciente conferencia de prensa, el Primer Ministro de Japón, Shinzo Abe, declaró que el estadio que reemplazaría al existente Estadio Nacional de Kasumigaoka no estaría a tiempo ni para el Mundial de Rugby de 2019 ni para los Juegos Olímpicos de 2020, como se tenía planeado originalmente.
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"He escuchado la opinión de la gente por más de un mes, pensando sobre la posibilidad de una revisión. Hemos decidido retroceder al comienzo del plan del estadio para los Juegos Olímpicos y Paraolímpicos de Tokio y comenzar desde cero", señaló Shinzo Abe en una reciente conferencia.
A pesar de la crítica inicial y el rechazo explícito por parte de arquitectos de la talla de Toyo Ito y Fumihiko Maki, hace un tiempo atrás les comentamos que el gobierno japonés había decidido avanzar con el proyecto y sin realizar modificaciones, considerando que cualquier actualización retrasaría el proyecto.
Luego de la cancelación del proyecto, la oficina Zaha Hadid Architects respondió a través de un comunicado de prensa:
"Nuestros equipos en Japón y el Reino Unido han estado trabajando duro con el Consejo de Deporte de Japón para diseñar un nuevo estadio nacional que estuviera listo para el Mundial de Rugby de 2019, los Juegos Olímpicos de 2020 y cumplir la necesidad de un nuevo hogar para el deporte japonés en los próximos 50 o 100 años.
Es absolutamente correcto que los beneficios y costos del nuevo estadio nacional deban ser clara y adecuadamente comunicado y entendidos por el público y quienes toman las decisiones en Japón. Esperamos que esto sea uno de los objetivos de la revisión anunciada por el Primer Ministro.
El real desafío para el estadio ha sido acordar un aceptable costo de construcción en el contexto de aumentos anuales en los costos de construcción en Tokio y un plazo fijo".
