En la actualidad, las políticas habitacionales en Chile tienden a relegar la vivienda social a la periferia, segregando a sus habitantes y extendiendo la ciudad más allá de lo necesario. El arquitecto Iván Theoduloz -en colaboración con la Municipalidad de Santiago- se ha propuesto romper con esta tendencia de desarrollo urbano con el objetivo de reintegrarlas al centro de la ciudad, donde existe una gran cantidad de infraestructura en abandono y deterioro.
Este proceso de renovación se ha materializado en el proyecto “Neo-Cité San Francisco”, levantado en un terreno municipal con un presupuesto de 821 UF por vivienda. Sus condiciones espaciales rescatan la herencia del cité, maximizando el espacio común, el enfrentamiento y la cercanía de fachadas, una accesibilidad controlada, y un sistema de circulaciones simple y volcado hacia el espacio público central.
Descripción por el arquitecto. Planificación Urbana
La actual política habitacional de desarrollo urbano, impulsada por el Estado de Chile, segrega y estigmatiza a la vivienda social relegándola a la periferia, en lugares sin infraestructura, marginales y alejados de las redes de oportunidades que una ciudad ofrece, generándose inevitablemente guetos de pobreza con un alto desarraigo y un fuerte costo social y económico. Esas familias, en su gran mayoría, requieren seguir ligadas a algún centro urbano y como si esto fuera poco, con este modelo, la ciudad se extiende indiscriminadamente a costa de la disminución de un territorio agrícola cada vez más vulnerable.
Por otro lado y en el absurdo total, tenemos en la comuna de Santiago, importantes superficies de terreno en el más absoluto deterioro y abandono, que perfectamente podrían, algunas de ellas, acoger un proceso lógico de renovación e integración urbana, donde podríamos reconstruir una ciudad inclusiva y equitativa, con diversidad social y donde aprendamos a convivir los unos con los otros.
Frente a este escenario y conjuntamente con la Municipalidad de Santiago nos hemos propuesto quebrar la actual tendencia de desarrollo urbano y para ello hemos ideado desarrollar una serie de Proyectos de Vivienda Social al interior de la comuna. Bajo ese objetivo entre los años 2013 y 2014 construimos el “Neo-Cité San Francisco”, el primer proyecto ubicado en uno de los barrios tradicionales del casco antiguo, dando así además el inicio a la erradicación definitiva de familias del quintil más pobre de la sociedad, que habitan informalmente en el centro de la capital.
Como hoy no existe un programa estatal que permita implementar proyectos de renovación urbana como este, para el caso de San Francisco, la Municipalidad debió aportar un terreno de su propiedad a razón de UF 200 (US$ 8.571) por familia, más UF 117 (US$ 5.014) por vivienda, lo cual sumado a las UF 504 (US$ 21.600) por familia que asigno el Programa Fondo Solidario 1 del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU), permitió financiar la construcción de este proyecto a razón de UF 821(US$ 35.185) por vivienda. Sin embargo para otros proyectos en otras comunas centrales, donde los municipios no poseen terrenos, se requiere inevitablemente de un financiamiento estatal mayor al que actualmente contempla el Ministerio, por lo tanto el Gobierno debiera asumir este desafío como un proyecto de estado creando un programa especial de vivienda social, que nos permita hacernos cargo en forma urgente de esta ciudad enferma de segregación e injusticia y avanzar hacia una sociedad más humana y solidaria.
Renovación Urbana
La manzana tradicional de Santiago -como cuerpo vivo- ha estado en permanente transformación desde su primer trazado de 4 solares del siglo XVI, incrementando la subdivisión predial con edificaciones de 1 piso durante los siglos XVII y XVIII y densificándose en mayor altura y al interior de la manzana con pasajes y cites a mediados del siglo XIX, buscando satisfacer la escasez de viviendas de la época, debido a la industrialización.
Como proceso de acción permanente en la ciudad, la renovación urbana supone la evolución natural de los edificios que la componen, a través de mecanismos como la rehabilitación, la modificación y la sustitución, pero también debe implicar la interrelación y continuidad de aquellos, a través del tipo edificatorio, valores culturales y costumbres sociales.
Los barrios del centro son un tejido que crece internamente extendiéndose a modo de un relleno ininterrumpido, que va sumándose a si mismo desde una estructura de organización continua, adaptándose o ajustándose a la trama existente de llenos y vacíos. Por lo tanto la renovación de estos lugares debe desarrollarse en un intento permanente de constitución y reconstrucción del tejido urbano, donde cada nuevo proyecto se entreteja con el contexto y re-cree ciertas condiciones sociales y arquitectónicas que aludan al pasado en un interés por re-descubrir los infinitos potenciales que ocultan los sedimentos de nuestro patrimonio urbano.
Vecindad Urbana
El desarrollar y estimular la convivencia social, alentando la solidaridad entre vecinos ha sido principio importante para el desarrollo de este proyecto, extremando la maximización del espacio común, el enfrentamiento y cercanía de fachadas, una accesibilidad controlada, y un sistema de circulaciones simple y volcado hacia el gran espacio de reunión y esparcimiento, intentando así construir un entorno unitario en que las instancias de relación y contemplación enriquezcan la vida colectiva y sean complemento del habitar intimo y privado.
En la calle San Francisco, entre Maule y Ñuble, en lo que se conoce como el barrio Sur de Avenida Matta, se ubica este primer proyecto de Vivienda Social, inserto en una trama urbana de cuadricula con fachada continua, que inicio su consolidación morfológica a partir del siglo XIX, a través de un fuerte desarrollo de cites al interior de la manzana para acoger principalmente a las viviendas de las clases obreras de la época. El Cité como tipología, cuyo desarrollo se generó en terrenos angostos y muy profundos, es una arquitectura colectiva de viviendas económicas, en baja altura y alta densidad, de forma lineal, que se configura a partir de 2 crujías paralelas, adosadas en un 100% a la medianería y desarrolladas hasta el fondo del predio, generando un vacío o patio interior largo y estrecho, hacia el cual se vuelcan viviendas simples o superpuestas, también llamadas “casas de alto”.
Desde este contexto formal y social y como una suerte de metáfora arquitectónica del desafío a que se enfrenta nuestra ciudad y en un afán por respetar el patrimonio existente, surgió la voluntad de reconstruir este fragmento urbano a partir de la tipología de "Cité", por cuanto en ella se encuentra plasmada la historia de este lugar que como referente arquitectónico tradicional del barrio, conserva a la fecha una forma de vida urbana con integración y absolutamente vigente, por lo tanto perfectamente posible y oportuna de ser reeditada contemporáneamente.
El proyecto "Neo-cité San Francisco" que se emplaza en un terreno de 17 metros de frente por 72 metros de fondo, construye un patio interior, define la calle corredor y articula exterior e interior a través de un zaguán a partir del cual el espacio público penetra y conquista el interior de la manzana, acogiendo a 48 viviendas de entre 55 y 70 m2, que se han dispuesto en un cuerpo continuo de 3 y 4 pisos, ordenándose una sobre la otra hacia el patio interior y una al lado de la otra hacia la calle, reconociendo de esta manera 2 formas de relacionar el lleno con el vacío en el tejido histórico del centro de Santiago.
Proyecto: Neo-Cité San Francisco
Arquitecto: Iván Theoduloz, Arquitecto Universidad Católica de Chile, 1992
Calculista: Cyl Consultores
Constructora: Hym
Mandante: Municipalidad de Santiago, MINVU
Superficie Terreno: 1.352 m2
Superficie Construida: 3.078 m2
Ubicación: Calle San Francisco N° 1666, Comuna de Santiago, Santiago de Chile
Año Construcción: 2013 - 2014
Fotografías: Iván Theoduloz, Gabriel Renié (Vía Arquibus)