Tal como les informamos, el Concejo Municipal de Santiago (Chile) decidió de manera unánime premiar con el primer lugar a la oficina BBATS+TIRADO en la segunda y final etapa del concurso de diseño de arquitectura del futuro Parque Museo Humano San Borja en Santiago.
Mientras el segundo lugar fue otorgado al equipo de Jadue Livingstone + MOBIL arquitectos, quienes proponen un parque pensado como "un espacio articulador que se abre hacia la Alameda, atrae visitantes y conecta diversos puntos relevantes del sector", a través de tres principales estrategias: límites, recorridos y la renovación de áreas deterioradas. Asimismo, enfrentan "la falta de unidad en el paisajismo existente (introduciendo) una especie arbórea con el objetivo de crear un entorno homogéneo y regular en la totalidad del parque".
A continuación, conoce en profundidad la propuesta ganadora del Segundo Lugar en el concurso chileno.
Extracto de la memoria: en primer lugar, la remodelación del Parque San Borja pretende funcionar como un proyecto canalizador para la renovación y re- valorización del sector. El Parque y el Museo buscan formar parte del grupo de hitos urbanos presentes en la zona. En este sentido, el Parque se propone como un espacio articulador que se abre hacia la Alameda, atrae visitantes y conecta diversos puntos relevantes del sector.
Se propone abrir el parque hacia la ciudad y articularlo de manera correcta tanto con su contexto inmediato como general. Se busca aprovechar su condición de espacio verde consolidado para abrirlo hacia el entorno y maximizar su uso. La correcta apertura y articulación de las partes se propone a través de tres estrategias principales:
- Límites: se plantea descomponer los taludes pronunciados que separan al Parque del nivel de la calle con el objetivo de generar terrazas de acceso con programas de borde los que se conectarán con los flujos peatonales existentes. De esta manera, el parque queda accesible desde sus frentes perimetrales, ahora vinculados con la ciudad, asegurando su conexión y acceso.
- Recorridos: En primer lugar se propone reordenar la dirección de las calles y homogeneizar el perfil que circunda el Parque con el objetivo de crear una calle de baja velocidad que rodea al Parque y protege al peatón. En segundo lugar, se propone re-organizar el sentido del tráfico de los automóviles para simplificar y disminuir los flujos. Para ello, se propone suprimir el paso bajo nivel que accede a los estacionamientos, transformándolo en una plaza de acceso para el Parque y las esculturas. Por último, se propone simplificar y ordenar la multiplicidad de recorridos peatonales existentes, se suprimen los callejones creando accesos más abiertos, iluminados y despejados.
- Renovación de áreas deterioradas: Se propone activar zonas dañadas a través de la introducción de plazoletas que contienen esculturas, mobiliario, arborización e iluminación. Se propone transformar espacios deteriorados en lugares abiertos, visibles y de acceso universal que funcionen como elementos articuladores entre el Parque y los hitos urbanos que lo rodean permitiendo así extender el parque hacia sus alrededores.
PARQUE HUMANO
La renovación propuesta para el Parque San Borja busca en primer lugar respetar lo existente tanto en su dimensión de paisajismo como en la rica agrupación de programas que éste alberga. Es por este motivo que la mayor cantidad de modificaciones se ubican hacia el perímetro de él. La propuesta pretende generar un parque que albergue y reúna exitosamente tanto el nuevo programa de museo como los valores existentes en el lugar. La propuesta busca como objetivo principal poner en valor el parque y la obra de Mario Irarrázabal, otorgando carácter al lugar y respetando los intereses de los vecinos y la comunidad en general.
Se toma como punto de partida la posición de los árboles existentes, las circulaciones principales, los accesos y los elementos construidos de mayor tamaño. Son éstos los que conforman la estructura base de la intervención.
Con el objetivo de responder a la falta de unidad en el paisajismo existente, se propone introducir una especie arbórea con el objetivo de crear un entorno homogéneo y regular en la totalidad del Parque. Además, se busca con este elemento generar un patrón uniforme que permita resaltar las esculturas de Mario Irarrázaval con respecto al contexto, en otras palabras, se busca generar un “telón de fondo” para apreciar las obras de artes.
En cuanto a la relación del parque con su contexto mediato, la propuesta defiende la idea de abrir el parque hacia sus alrededores con el objetivo de romper su condición ensimismada existente y hacer del parque una extensión de la Iglesia, la Universidad de Chile y las Torres San Borja. Para este motivo, se proponen trabajos de suelo para disminuir las grandes diferencias de altura y se introducen programas de borde para atraer a los transeúntes. La reja perimetral se modifica y reubica, generando así espacios abiertos a la comunidad y un frente verde para los vecinos. El límite del parque se desdibuja al retraer la reja de acceso, y los peatones que circundan pueden utilizar los bordes sin tener que entrar al Parque.
Tal como se dijo previamente, la propuesta mantiene y extiende el programa existente. Se proponen algunas modificaciones tales como la reubicación de los jardines comunitarios (por motivos de soleamiento y extensión), y se intenta separar las actividades mas dinámicas (fútbol, patinaje, ejercicio, etc.) de las pasivas (contemplación, descanso, paseo) para así asegurar el buen funcionamiento de ambas. Gracias a esta definición, se crea un cuadrante de gran riqueza programática que responde tanto a las actividades individuales como vecinales, pudiendo albergar gran cantidad de gente durante celebraciones.
En resumen, el programa se define según cuatro actividades principales:
- Museo de esculturas (Interior y Exterior)
- Programas de borde (ajedrez, almuerzo, decanso): buscan atraer mayor cantidad de gente al Parque desde la vereda.
- Programas activos (juegos, patinaje, multicanchas): Se decide reubicar y ampliar el programa de deportes, para formar un núcleo activo que no compita ni altere el buen funcionamiento del Museo.
- Huertos comunitarios: Se trasladan junto a la pérgola de acero existente para así ponerla en valor y además extender el área de jardines comunitarios a una zona que presenta mejores condiciones de asoleamiento.
MUSEO DE ESCULTURAS
El Museo busca re-construir el límite norte y abrir el Parque hacia la ciudad a través de un edificio transparente de carácter público. Además, se hace cargo de construir la diferencia de altura, por medio de un volumen que se abre tanto hacia la calle como hacia el Parque. En otras palabras, el Museo propone generar una nueva puerta de acceso, un umbral que invita al peatón a entrar al Parque y disfrutar de las esculturas y la vegetación.
Todos los recintos del edificio están vinculados en un sólo espacio homogéneo distribuidos en diferentes niveles. Se proponen dos accesos: un acceso amplio y abierto al parque a través de un volumen que alberga la cafetería, y otro acceso, más restringido por el nivel inferior. La cubierta se une con el nivel del Parque, generando una cubierta verde que es a la vez, lugar de exposición y espacio público. De esta manera, el porcentaje de ocupación del Parque disminuye y el edificio se integra al mismo.
Programa: El edificio busca recoger y exponer un gran número de esculturas de menor tamaño de Mario Irarrázaval. A través de un volumen simple e iluminado, se busca la correcta exposición de las obras (según palabras del escultor…”la mejor manera de apreciar mis esculturas es a partir de los matices y cambios que presenta la luz natural sobre ellas”). El programa se organiza en 3 niveles escalonados que aprovechan el desnivel existente y comparten una misma cubierta. Los espacios se ordenan según el grado de intimidad y luminosidad que requieren. En este sentido, la cafetería se ubica asociada al parque, las salas de exposición se disponen en los pisos inferiores que poseen amplias alturas e iluminación natural, y la sala de archivos y bodega abierta se ubica semienterrada, en una zona más recogida y silenciosa.
Materialidad propuesta: Hormigón armado, paneles de hormigón prefabricado, vidrio laminado antivandálico, acero, madera, adoquin de hormigón prefabricado.
Revisa la propuesta de Jadue Livingstone presentada en la primera etapa de este concurso acá.
Concurso
Diseño de arquitectura de Parque Museo Humano San BorjaPremio
Segundo LugarArquitectos
Jadue Livingstone, Mobil ArquitectosUbicación
Parque San BorjaEquipo de Diseño
Paula Livingstone, Javiera Jadue, Antonio Lipthay, Carole Gurdon, Pilar García y Patricio HuidobroIngeniero Civil
Alfonso LarraínIngeniero Agrónomo
Alejandra AcuñaRiego
Claudio de la CerdaMuseografía
José Pérez de Arce, SUMOIluminación
Antonia Peon-Veiga, Matías LópezImágenes
Alessandra de la MossMaqueta
Cristian MerinoAño Proyecto
2014Fotografías
Cortesia de Paula Livingstone