- Año: 2014
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Fotografías:Aitor Ortiz
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Galtzaraborda es un barrio situado en el municipio de Errenteria que se construyó a mediados de los años 60. Debido al gran desarrollismo industrial de la región, se requirió la construcción de una gran cantidad de vivienda, destinada a absorber la ola migratoria laboral, lo cual generó un urbanismo con graves carencias, ausencia de espacio público, falta de accesibilidad, etc., problemas que se han acentuado con el progresivo envejecimiento de la población.
El proyecto se sitúa en un solar central, que quedó desde los orígenes sin urbanizar y que constituía una verdadera fractura en el tejido urbano de la ciudad.
La intervención, más allá de resolver un garaje, función que motiva el proyecto, se concibe además como una oportunidad para generar una infraestructura que resuelva de forma conjunta la accesibilidad total del barrio, proporcionando nuevos espacios públicos, zonas verdes y espacios de ocio.
El programa de 111 aparcamientos, se divide en dos edificios con dos torres de ascensores panorámicos, uno por edificio, y dos amplias plazas urbanas sobre las cubiertas de ambos.
El proyecto conecta transversalmente los espacios públicos con las urbanizaciones laterales y garantiza el acceso en vertical desde el punto más alto del barrio hasta la cota más baja del mismo donde se sitúa el apeadero del tren que enlaza Errenteria con Donostia, San Sebastián.
Los edificios forman dos volúmenes semienterrados, absorbiendo el desnivel del solar, generando el mínimo impacto estético y volumétrico. Muchas de las plazas de aparcamiento son abiertas lo que permite disponer de una fachada semi-trasparente detrás de la cual se intuye la actividad interior, evitando un frente ciego e inerte.
Mediante desarrollos en rampa y escaleras, se permite el recorrido por el perímetro exterior de los edificios, dando continuidad a los tránsitos a través del parque y de las edificaciones contiguas.
Las superficies de cubierta poseen distinto tratamiento superficial según su uso, conviviendo zonas de pavimento duro, con amplias zonas verdes. Las cubiertas ajardinadas, restituyen los espacios verdes ocupados por la edificación e introducen la naturaleza en un entorno urbano altamente densificado.
