Este año el ganador del primer lugar en el Daylight Award, un prestigioso premio otorgado por la Fundación Living Daylights que proyectó honores al que llegara con resultados óptimos en la combinación de luz natural, luz artificial y diseño en el entorno construido, se le ha dado a Skil Kaap, Marítimo y el Museo de Beachcombers en la isla holandesa de Texl.
Diseñado por Mecanoo Architecten, el usuario es capaz de sentir el clima debido a la transparencia del edificio. Según el jurado, este proyecto se traduce como: “Sol, nubes, truenos y lluvia: al aire libre, viene dentro de la percepción y la emoción, y ésta es una cualidad fundamental para un edificio con el Mar de Wadden en la puerta.”
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Kaap Skil juega con la luz del día y el contraste entre la luz natural y la luz artificial, claridad y oscuridad en diversas maneras. La fachada de vidrio en el frente de las tablas de madera ofrece una visión atractiva de los famosos cielos del norte de Holanda, para los visitantes de la cafetería del Museo. En el interior del edificio, estas placas de madera, emiten un patrón lineal de la luz del día y de la sombra, creando una atmósfera impregnada de luz y refugio.
La obra maestra del museo: Reede van Texel, se encuentra en el sótano, en un espacio compuesto por dieciocho metros de largo y cuatro metros de profundidad, dónde se expone con gran detalle el impresionante espectáculo de las decenas de barcos anclados frente a las costas de la Isla de Wadden en la Edad de Oro. En ese periodo la flota de la Compañía Holandesa de las Indias Orientales fijaría su ancla en el Reede van Texel antes de navegar fuera de “Oriente”. Los visitantes son atraídos por la muestra tras las proyecciones y animaciones, la creación de un espacio íntimo que alberga una sensación de misterio.
En la primera planta, el cielo inunda los objetos con una pantalla de luz. Las vitrinas móviles de los marcos de acero robusto y vidrio, crean un efecto de transparencia en los objetos de colección que parecen flotar dentro del espacio.
Las vigas que atraviesan los tragaluces del techo, les da a los visitantes una sensación de estar bajo el agua. El interior del museo y las dos exposiciones han sido diseñados por Kossmann.dejong de Amsterdam.
