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Arquitectos: STUDIO TERRATECTS
- Área: 149 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Studio IKSHA, Running Studios
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Urul, situada en medio de los serenos paisajes de Wayanad, es un proyecto basado en la investigación diseñado para una pareja amante de la naturaleza. Esta residencia de dos dormitorios sumerge a sus ocupantes en la belleza circundante al tiempo que honra los colores y elementos de la naturaleza. Situada contra una colina rocosa con una vista panorámica del pico Chembra y un árbol típico indio como punto focal, la casa se integra armoniosamente en su terreno. La planta baja en voladizo minimiza la alteración del terreno, creando una sensación de balcón. Un estudio medioambiental identificó dos paleocanales subterráneos que guiaron la ubicación del pozo.
La residencia ofrece vistas cautivadoras desde todos los ángulos. Un corte circular en la bahía de entrada en forma de C enmarca el Pico Chembra, preparando el escenario para el viaje escénico por delante. La sala de estar y el dormitorio principal continúan esta temática, con el cristal sustituyendo a la pared sur, invitando a la naturaleza al interior. La distribución interior abierta enmarca las vistas al exterior o al interior, garantizando una conexión perfecta con el entorno. Un puente acristalado que conecta la cocina con el bloque más adelante difumina aún más los límites entre arquitectura y naturaleza.
La construcción de Urul fusiona las técnicas tradicionales con la innovación moderna, utilizando materiales y artesanía locales. Mediante investigaciones y entrevistas con albañiles ancianos y tribus locales, se obtuvieron valiosos conocimientos sobre la construcción en armonía con la naturaleza, empleando técnicas sostenibles y materiales obtenidos directamente del lugar. Este enfoque ha influido en las prácticas locales de construcción, y se ha investigado el enlucido de barro por sus cualidades impermeables y a prueba de insectos. Los artesanos locales recibieron formación en este método, que siguen utilizando en sus proyectos.
El árbol maduro indio Dalbergia sissoo (Sisu) está entretejido en el diseño, simbolizando la conexión entre la casa y su contexto. Al subir al dormitorio de la primera planta, la presencia del árbol ofrece una vista única, impregnando al espacio de encanto natural y dramatismo.
Diseñado para aprovechar al máximo la luz y la ventilación naturales, el edificio capta el juego de luces y sombras a lo largo del día. El espacio de pooja (sala espiritual) de la entrada, iluminado por una claraboya, desprende una atmósfera divina. Los troncos de madera recuperados, conocidos localmente como shavock, revisten los techos del salón y la primera planta, proyectando sombras sorprendentes en las paredes. Los recortes circulares de la escalera metálica crean divertidos dibujos debajo. Esto transforma la casa en un reloj de sol viviente, que permite a los residentes medir la hora observando las sombras cambiantes, combinando funcionalidad y atractivo estético.
La historia del sitio de deslizamientos de tierra y escorrentía de agua planteó desafíos en la construcción. Se excavaron zanjas de hasta 2 metros de profundidad a lo largo de los caminos de deslizamiento identificados y se rellenaron con rocas para crear un drenaje artificial. Un muro de contención en la parte trasera actúa como un amortiguador contra las caídas de piedras, mientras que se plantó bambú (Dendrocalamus Giganteus) para estabilizar aún más el suelo. Urul se integra armoniosamente con su entorno, invitando a la naturaleza al interior y priorizando la sostenibilidad. Ofrece un festín visual con un diseño inspirado en la naturaleza, asegurando que los residentes experimenten cada faceta del entorno dentro de la comodidad de un hogar.
