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Arquitectos: Davood Boroojeni Office
- Área: 3850 m²
- Año: 2024
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Fotografías:Deed Studio
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Eshtehard es un suburbio semi-industrializado de la capital, conocido por su vasta y árida área que ha sido una opción principal para el desarrollo del espacio industrial de Teherán durante los últimos cincuenta años. Nuestro equipo de arquitectos estuvo presente por segunda vez en Eshtehard para implementar un proyecto arquitectónico, esta vez para el departamento de procesos de la Fábrica de Polímeros Shamim.
El edificio de la fábrica tiene 2200 metros cuadrados y consta de dos formas desequilibradas y no convencionales. La idea principal en la arquitectura fue mostrar el concepto de optimización en el propio edificio, resultando en cualidades en el diseño espacial que pueden ser equivalentes a la optimización. El edificio busca alinearse con el rendimiento del departamento de procesos de la Fábrica de Polímeros Shamim al dar vida a algunos de sus elementos.
Este proyecto presenta un enfoque único para el diseño de fábricas al centrarse en crear un espacio que atienda las necesidades y experiencias de los trabajadores. Se utilizan láminas de hierro crudo para las paredes y techos, y se incorporan elementos narrativos en el diseño para dar vida al espacio. El proceso de diseño involucró en gran medida la opinión de los trabajadores de la fábrica, quienes participaron activamente en la planificación del espacio según sus necesidades y preferencias.
Una característica notable es la inclusión de áreas designadas para fumar en los lados este y oeste del edificio, abordando el desafío de proporcionar espacios adecuados para que los empleados fumen mientras se mantiene un ambiente de trabajo productivo y armonioso. Además, el diseño incluye trampillas transparentes en las paredes para crear una sensación de apertura y continuidad dentro del espacio.
El diseño incorpora elementos que reflejan las necesidades y solicitudes de los empleados, como la adición de un gallinero gratuito sugerido por uno de los empleados durante el proceso de construcción. Esta atención al detalle, impulsada por la participación colectiva de los empleados, tiene como objetivo proporcionar un ambiente de trabajo cómodo y satisfactorio que se sienta como un segundo hogar.