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Arquitectos: Rodrigo de la Cerda Arquitecto
- Área: 370 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Cristobal Correa M.
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Proveedores: Concón Maderas Impregnadas, GRUPO CHC WASSER, Maderas ConCon
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La "Casa ML" está ubicada en Chile en la costa de Zapallar, en altura frente al mar, donde el borde es roca y se ve como rompe la ola. La vista es privilegiada emplazándose en la cota 180 sobre el nivel del mar, en la ladera poniente del cerro.
La Vista en todas sus dimensiones; esta casa busca dentro de un marco muy definido por las normas exigidas, lograr para todos sus espacios interiores captar la vista magnífica que regala este escenario frente al mar y su paisaje.
Para esto plantee una diagonal que va desde la vista a la bahía de Cachagua hasta alcanzar la vista entre los cerros a la bahía de Zapallar.
Esto genera que los recintos al centro queden mirando una vista panorámica del mar hacia el horizonte poniente. Y en sus extremos por un lado está el Living/Comedor, el cual recibe un tremendo aporte por parte de la diagonal logrando una amplitud tanto en su espacialidad como en su horizonte visual.
En el otro extremo de la diagonal el dormitorio principal en la punta, abalconandose en el cerro hacia la vista donde rompen las olas, también logra obtener la vista a zapallar y el horizonte del mar en su plenitud.
Es así como la casa se va organizando en base a esta diagonal, tanto en su interior como en su proyección hacia el exterior. Todos sus recintos están conectados con sus terrazas y el jardín. Desde que entras a la casa se proyecta el hall con vista al mar y al jardín.
El segundo piso se conecta con el primero por medio de una doble altura en la caja escalera, llegando a un hall de distribución con vista al Sur-Oriente, para contemplar un paisaje también increíble, de cerros y cordillera. Desde este se accede a 4 dormitorios, los 3 del frente quedan abalconados con una vista en altura realmente impresionante con las rompientes en el borde mar a lo lejos. Y la cuarta con vista a la bahía de cachagua y borde mar hacia el sur.
En su fachada de acceso hacia la calle, se genera un juego de muros de piedra los cuales dan cabida a su ingreso, marcado por un muro de hormigón visto. Estos muros se van girando guiados por la diagonal del proyecto y logrando romper la fachada para generar las aperturas necesarias para la cocina y comedor.
Por otro lado, la diagonal va marcando también la apertura y continuidad de las terrazas en el exterior, las cuales se van adaptando a la pendiente del terreno.
La primera terraza baja un poco para respetar la vista interior y queda protegida por el volumen del segundo piso, el cual deja enmarcada la vista casi en su totalidad. Después en un nivel más bajo se proyecta una terraza con piscina integrada con efecto infinito, que da esa sensación de unión visual con el mar.
Más allá se proyecta una tercera terraza con hot-tub, que queda conectada mediante un balcón con el dormitorio principal y mediante unas huellas sutiles con la terraza de la piscina.
Después se remata en un último nivel proyectado por paisajismo, que enaltece aún más la casa y conexión con el jardín. Los trabajos sutiles de piedra en el jardín proyectado por las paisajistas, acompañado con la vegetación propuesta es realmente un aporte en la misma línea de la casa.