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Arquitectos: pat arquitectura
- Área: 160 m²
- Año: 2023
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Fotografías:Fernando Schapochnik
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Proveedores: EGGER, FV, Glitter, Hidromet, Piazza, Purastone, Vite
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este proyecto consiste en la refuncionalización de una construcción existente de propiedad horizontal, típica de la ciudad de Buenos Aires, de los años 70s. Se encuentra situada en el borde de la ciudad, inmersa en un entorno urbano particular, rodeado de barreras tales como la autopista General Paz, las vías del tren Mitre, una avenida de transito de cargas y un parque lineal.
La calle sobre la que se sitúa esta vivienda es una de las salidas de la ciudad más concurridas, por la cual circulan colectivos, autos y camiones. A su vez, la manzana frentista es en su totalidad una plaza, con usuarios cambiantes según el momento de la semana. Entre lunes y viernes, los vecinos más próximos a la misma pasean a sus perros y los recuperadores urbanos del centro de reciclaje urbano juegan a la pelota. Los fines de semana, vecinos de todo el barrio se acercan a disfrutarla con sus reposeras al sol. En el centro de la manzana reina el silencio, cada parcela cuenta con una, dos o tres viviendas, por lo cual la densidad es significativamente baja.
El principal objetivo de la intervención fue conservar y potenciar lo existente, proyectando una organización de los nuevos espacios según su uso individual o colectivo, y su relación con la calle, la plaza y la manzana. Los principales ejes de la preexistencia fueron la división en dos plantas y la partición del frente en dos, a partir de la modulación estructural. Respetando estos ejes, se desarrolló en la primera planta los espacios individuales, y en la segunda planta los espacios colectivos. Estas dos plantas se encuentran relacionadas a partir de un volumen de circulación vertical que contiene a las escaleras en un gran vacío.
En el primer nivel, un muro cargado de equipamiento divide el dormitorio (con su baño y vestidor) del espacio de estudio y trabajo. Este resuelve los escritorios, las áreas de guardado y el ante-baño. En la planta alta, originalmente azotea, la nueva ampliación contiene al estar y comedor que se desarrollan en conjunto, acompañados en cada instancia por el mismo muro equipado que, en este nivel, en lugar de dividir, se recuesta en el perímetro resolviendo un baño, el guardado y la cocina.
Hacia el frente, se conservó la diagramación original de la vivienda, agrandando las aberturas e incorporando una nueva expansión sobre el acceso de planta baja. La nueva envolvente metálica controla la luz del sol sobre la fachada con orientación oeste, incorpora esta nueva expansión y resuelve la baranda de la terraza. Hacia el interior de la manzana, se respetaron las ubicaciones de las aberturas existentes que reciben el sol de la mañana.
Los espacios abiertos se dimensionan según qué programa que expande, armando en la primera planta un balcón a lo largo del estudio y en la planta alta una terraza que, con carpinterías que se abren por completo, busca fusionar interior y exterior para poder extender ese espacio fluido del área colectiva hacia la plaza.