Enfrentar el paso del tiempo constituye uno de los desafíos constantes de la arquitectura. La naturaleza efímera de la humanidad a menudo nos impulsa a buscar la construcción de estructuras capaces de resistir no solo el paso de los años, sino también de agentes externos, como el clima, el desgaste operativo e incluso la misma interacción con los seres humanos. Ya sea mediante monumentos imponentes, edificios contemporáneos icónicos o la utilización de materiales sumamente resistentes, nuestra visión y legado arquitectónico pueden ser preservados.
El acero inoxidable ejemplifica de manera destacada la resistencia al paso del tiempo y a los factores que lo rodean. Su durabilidad lo ha hecho popular en varias aplicaciones, desde fachadas hasta mobiliario de cafetería y mamparas de baño. En el caso de estas últimas, son ampliamente utilizadas en baños públicos de aeropuertos, escuelas y clubes sociales; tipologías que están sometidas a un alto tráfico y que requieren el uso del acero inoxidable combinado con acabados que proporcionen protección reforzada y anticorrosiva, como el acabado antigrafiti, desarrollado por Sanilock. Esto se traduce en mamparas más duraderas y resistentes.
El acabado antigrafiti puede aplicarse en todo tipo de sanitarios públicos de alto tráfico. Debido a su capa protectora anticorrosiva, estas mamparas no son susceptibles a quemaduras ni desgarros, lo que facilita la eliminación de manchas cotidianas, como las de bolígrafo, pintura en aerosol, lápiz labial y tintas permanentes. Esto se traduce en un ahorro en los costos de mantenimiento y en la necesidad de productos de limpieza especializados, ya que solo se necesita agua, jabón suave y un paño limpio para su limpieza.
Fabricadas en acero y recubiertas con un esmalte protector especializado, las mamparas con acabado antigrafiti son un sistema que incluye cualidades antivirales e higiénicas. La gama consta de un conjunto de puertas y paneles, cuya producción inicia con la creación de una estructura perimetral reforzada en el interior.
Todas las uniones están protegidas mediante la aplicación de un primario anticorrosivo. El interior de esta estructura se rellena con poliestireno expandido higiénico y de capacidad autoextinguible. Posteriormente, se aplica un adhesivo en las caras internas de las láminas con esmaltado antigrafiti, que luego son colocadas sobre la estructura. Para concluir el proceso de fabricación, se adhiere una moldura perimetral de acero inoxidable en la periferia de la mampara, así como los herrajes y accesorios.
Los diferentes componentes que integran el sistema permiten crear diversas configuraciones en planta, adaptándose a las condiciones espaciales de los baños y brindando soluciones tanto para cubículos de WC y mingitorios, como para regaderas y vestidores, proporcionando el nivel necesario de privacidad. De manera similar, los ocho modelos disponibles en la gama Sanilock ofrecen diseños tradicionales, como los modelos Estándar 4200, Regadera Estándar 5200 e Institucional 4500, hasta opciones sofisticadas y visualmente ligeras como el Cantilever Estándar 4700 y Colgante 4900, entre otros.
Los siete colores disponibles en acabado antigrafiti se adecuan a una variedad de propuestas de diseño que pueden ser implementadas en edificios de alto tráfico. El color blanco y blanco antiguo proporcionan una estética clásica y neutra para baños que buscan reforzar la sensación de limpieza e higiene, como en industrias y hospitales. Los colores gris natural, arena y café claro se ajustan a entornos que buscan una atmósfera más acogedora y cálida, como en escuelas y aeropuertos, mientras que el café chocolate y el negro aportan una sensación sobria adecuada para espacios como clubes sociales.
En conjunto, las cualidades técnicas, estéticas y modulares de las mamparas antigrafiti ofrecen una solución para edificios que buscan disminuir sus costos de mantenimiento y preservar la durabilidad de sus interiores y componentes fundamentales. Así, los edificios de alto tráfico pueden mantener su integridad a través del tiempo, gracias a un material que supone una inversión que mitiga daños y vandalismo, adaptándose con flexibilidad a diversas necesidades espaciales. Además, con su resistencia, fomentan la creación de espacios con ciclos de vida prolongados.
Para obtener más información sobre esta y otras soluciones de Sanilock, visita su sitio web o consulta el catálogo de productos.