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Arquitectos: Estudio Palacios
- Área: 315 m²
- Año: 2020
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Fotografías:Gonzalo Viramonte
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Proveedores: Blangino, Ciment, Edificor, Herrería Prosdócimo, Maderera Maldonado Schweizer, Peirano griferias
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Año 2020. Pandemia. Tiempo de reflexión. Tiempo de cambios. La idea de transformar DocumentA/Escénicas (sala de teatro) en Casa Documenta (casa y sala de teatro/ensayo/laboratorio) tiene que ver con la posibilidad de integrar un lugar de residencia con el espacio de trabajo, experiencia que a partir de la pandemia se ha desarrollado en diversos lugares del mundo.
En el barrio Centro, en calle Lima casi esquina Maipú, nos encontramos con esta casa de la época de la colonia según cuentan los primeros registros. A lo largo de su historia ha tenido varias intervenciones (en 1925 adquiere su fachada Art Noveau por ejemplo), siendo su último destino sala de teatro: DocumentA/Escénicas.
El estudio comenzó el proceso de transformación con la rotunda determinación de valorar esta casa histórica y muy querida por parte de los dueños; para lo cual se propuso generar una puesta en valor, para poder rescatar las cualidades espaciales exquisitas; y realizar una intervención integral readaptando todo el conjunto al nuevo y extenso programa: editorial / casa principal / pequeña sala de teatro / departamento hijo / departamento hija.
La intervención se centró en crear dos patios internos, lo cual fue posible a la reducción de la sala de teatro existente, y a partir de allí poder dar respuesta funcionales y de habitabilidad al pluriprograma. La casa entonces empieza a ser un paseo. Y varios mundos. A través de un pasillo se llega a un hall, con una gran biblioteca, que nos deriva a la zona editorial. Taller y showroom, ambas con ventanas a la calle.
De ahí pasamos al patio original de la casa, con un gingko central y enredaderas que trepan sobre la medianera, que nos da acceso directo a la casa principal. Aquí se huele lo original, tal vez el inicio de todo. Muros de adobe, ladrillos descarnados que forman arcos, perfiles oxidados, Y todo en un clima de intimidad maravillosa, donde la calle altamente transitada desaparece y sólo se escucha la música que los exquisitos propietarios proponen.
O nos vamos por un pasillo pequeño al primer patio que se ofrece como recibidor de la sala de teatro, ahora más pequeña. Esta se cierra y se abre, según la experiencia lo requiera, a los dos nuevos patios. A través de portones elevadizos extiende su capacidad; permitiendo a la vez una experiencia espacial particular que da lugar a varios formatos de ensayos y puestas en escena.
Y por último el fondo, donde habitan los hijos, cada uno independiente. Dormitorios que disfrutan de los patios propupuestos y una cocina comedor que comparten. Los tres patios internos, el primero original de la casa; y luego los dos nuevos patios laterales a la sala, son los que posibilitan todas las actividades y dan calidad a cada uno de los espacios.
Con respecto a la materialidad elegida para introducir nuevos elementos, se optó por la simplicidad y austeridad de los recursos (plenos lisos, monocromía blanca, algún detalle de color elegido); dejando sobreexpuestas las texturas originales de la casa que crean una atmósfera única. En Casa Documenta conviven varios tiempos y escalas, tal vez ahí radica su belleza.