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Fotografías:Miguel de Guzmán
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Ayuntamiento de Parla, un municipio ubicado a unos 20 kilómetros al sur de Madrid, España, hizo el llamado a un concurso el año 2005, en colaboración con el Instituto de Arquitectos de Madrid, para construir 826 viviendas, distribuidas en un total de seis parcelas, para ser alquiladas por personas jóvenes. Una de las novedades del concurso fue que la participación municipal consistía sólo en la gestión de los terrenos y la repartición de las unidades a los futuros inquilinos. Las empresas privadas se hicieron cargo de los gastos del concurso, la construcción y gestión de los ingresos por alquiler. Estas 156 viviendas son el resultado de este concurso, siendo uno de los seis proyectos adjudicados.
La propuesta, presentada en el concurso con el lema "situación de edificios" , se inspira en las postulaciones de la década de 1950, que interpreta la ciudad desde la experiencia individual, dejando atrás los enfoques funcionalistas. El plan se plantea como una colonización lúdica del espacio urbano, la liberación de la planta baja tanto como es posible, crea un campo de actividades que pueden variar dependiendo del usuario, el horario y las estaciones. En esta alfombra verde equipada. vinculado a la trama urbana circundante, las viviendas de una superficie de 35 metros cuadrados utilizables, tratan de dar cabida a tantas unidades como sea posible en la superficie disponible, agrupándose en cuatro torres compactas.
Cada una de ellas se organiza en torno a un espacio central, con luz y ventilación superior, lo que favorece la interacción entre los vecinos, tanto vertical como horizontalmente, garantizando al mismo tiempo, la ventilación cruzada en todos los niveles. Un núcleo de comunicación vertical sirve, en cada planta, cinco viviendas de un dormitorio y una de dos dormitorios.
Cada unidad se abre a un vacío exterior, no incluidos en los metros cuadrados exigidos en el programa, que trae la luz, ventilación y la energía en las viviendas, al mismo tiempo sirve como espacio de usos múltiples, que pueden ser incorporadas en las habitaciones para ampliarlas, o realizar de forma independiente un espacio de uso múltiple. Las únicas habitaciones que tienen una ubicación fija son la cocina y el baño, rodeado por las salas de estar y dormitorios. Con un presupuesto muy limitado - por debajo de 700 euros por metro cuadrado sobre rasante -, los cuatro edificios se adjuntan a la hoja de aluminio anodizado que mide 18 centímetros de ancho, lo que les da una imagen marcadamente contemporánea.