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Arquitectos: Castanheira & Bastai Arquitectos Associados, Jun Sung Kim, Álvaro Siza Vieira; Alvaro Siza, Jun Sung Kim, Castanheira & Bastai Arquitectos Associados
- Año: 2009
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Un gato se ha convertido en un museo.
Había una vez un emperador chino al que le gustaban los gatos. Un día llamó al pintor más famoso en el Imperio y le pidió que le pintara un gato. Al artista le gustó la idea y prometió que iba a funcionar. Pasó un año y el emperador recordó que el pintor todavía no le había dado la pintura del gato, entonces le preguntó, y el gato? Él está casi lista, contestó el artista. Pasó otro año, y otro y otro. La escena se repitió. Después de siete años, la paciencia del emperador llegó a su fin y él envió una carta al pintor: Y el gato? Han pasado siete años. Usted prometió y prometió, pero no he visto nada! El pintor toma una hoja de papel de arroz, tinta y un pincel y, en un gesto elegante y sublime, dibujó un gato, que no era sólo un gato, sino que el gato más lindo que el emperador había visto. El emperador estaba en éxtasis, abrumado por tanta belleza. Le preguntó al artista cuánto cobraría por tal hermoso dibujo. El pintor le pidió una suma que sorprendió al emperador. Tanto dinero para un dibujo que hiciste en dos segundos, delante de mí? dijo el Emperador. Sí Excelencia, eso es cierto, pero he estado dibujando gatos durante siete años, respondió el pobre pintor.
El proyecto para el Museo Mimesis, en la nueva ciudad de Paju Book en Corea del Sur, es un gato. El cliente no tuvo que esperar siete años por el diseño de un gato, pero Álvaro Siza ha venido diseñando gatos durante siete años. Él nunca ha visto a un gato de Corea porque nunca ha estado allí.
Un día él lo esbozó en el terreno y construyó un modelo pequeño, mostrando los límites y el contexto inmediato. En un solo gesto, un gato fue diseñado. La mimesis es un gato. Un gato, todo acurrucado y abierto, que se estira y bosteza. Al principio, los miembros del equipo de arquitectura no podían entender cómo ese dibujo de un gato podría ser un edificio.
En la arquitectura, después de un boceto inicial viene el tormento. El diseño inicial, las maquetas, los diseños, los comentarios, las preguntas, los nuevos diseños, los nuevos modelos, y una presentación para el cliente, que ya habían visto otros proyectos, pero no pudieron ocultar su sorpresa ante esto. Una vez aprobado, el proyecto avanzó dentro de los pasos habituales, que en Corea son más cortos y menos burocráticos.
El programa no se alteró, pero era necesario hacer algunos ajustes como parte del proceso evolutivo. Pensar en los materiales, las técnicas, la infraestructura, las convenciones de la representación, de modo que todo el mundo entendiera. En el sótano se encuentra la zona de servicio, tal vez una extensión de la zona de exposición, que se está convirtiendo en un hábito en los museos diseñados por Álvaro Siza. La planta baja es un espacio para la llegada y la distribución, áreas para exposiciones temporales y una cafetería/restaurante con todos los espacios necesarios. Las áreas de administración, área para el archivo administrativo y baños se encuentran en los entrepisos. El piso superior es para un espacio de exposición.
La luz, estudiada con tanto cuidado. Natural y artificial es vista como esencial. Permitiendo ver sin ser vista. Modelos y más modelos fueron construidos, algunos de los cuales se puede incluso entrar. También las imágenes en 3D. La forma será dada por el hormigón moldeado, gris claro, el color de un gato. En el interior, las paredes y techos blancos, de mármol y también de roble color miel.
Dibujar un gato es realmente difícil, ¡pruébalo! Puede tomará siete años! Por lo menos!
