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Arquitectos: Lemanarc SA
- Área: 230000 m²
- Año: 2012
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Nanjing Drum, la Torre del Hospital, fundado por el canadiense Misionero Dr. Macklin, se sitúa en el centro de la ciudad de Nanjing. Es uno de los hospitales más famosos de China.
Las expansiones anteriores de hospital fueron impulsadas por el desarrollo de nuevas tecnologías médicas, así como el aumento de población. A pesar de las notables escalas, la mayoría de las expansiones no son mucho más que urgentes expansiones para satisfacer las necesidades médicas. Como resultado, el diseño de muchos pisos no son organizados ni simples para el correcto funcionamiento del hospital. Por ejemplo, el área de consultas está en el lado oriente de Zhongshan Rd., conectado con los principales edificios del hospital, el lado poniente – se conecta a través de un estrecho pasadizo subterráneo, inconveniente para pacientes y personal.
El año 2004, la respuesta del hospital Drumtower a la creciente demanda de servicios médicos por una población más grande y rica, fue implementar una nueva expansión de 32 mil metros cuadrados entre Zhongshan Road y Tianjin Road. El proyecto de ampliación será seguido por una reorganización y revisión de la existente organización.
Después de muchas discusiones y consultas con el cliente, nuestro equipo de diseño, dirigido por Vincent Zhang, ayudó a crear un detallado proyecto a largo plazo. Se contará con 2800 camas, de las cuales 1600 son proporcionadas a través de la nueva expansión. Están previstas 10 mil consultas a diario y una superficie bruta total de planta de 230 m2.
Respecto a la escala, el proyecto se construye de la misma forma que la GFA de 420 metros y 88 pisos, Jinmao Tower, el edificio más alto de china, en aquel entonces. Sin embargo, contrario a las expectativas sobre un edificio para un hospital en altura, la elección fue sorprendente: En vez de apilar un piso sobre otro, el resultado es una relación de piso con jardines intermedios (relación piso-área 5:2). El preferir edificios bajos va en contra de la moda de rascacielos. Pero en el presente creemos que tomamos la decisión correcta ya que el plan de poca altura no solo reduce la presión de tráfico vertical – un constante problema para grandes hospitales, pero también crea grandes áreas de espacio urbano a escala de personas.
Pero los beneficios no viene de forma gratis. En realidad, el optar por una forma dispersa y poca altura, los arquitectos se enfrentan a varios desafíos: desde la organización de la disposición de las zonas de nuevas construcciónes, la comprensión y el análisis de la operación y las reglas del hospital, a la planificación de un modelo de funcionamiento para el nuevo hospital. Y más importante aún, nos obliga a reconsiderar la posibilidad de heredar la cultura médica y explorar la nueva identidad del servicio médico.
